Uno de los remakes del año, se abre camino entre la fantasía, la aventura, el misterio y el cuento de reivindicación ecológica. El Libro de la Selva, adaptación live action del clásico animado de la casa Disney, basado en la famosa novela de RudyardKipling.
El relato apuesta por la reconciliación de las especies y del ser humano con su medio ambiente. Un mensaje de plena vigencia. Narra la historia de Mowgli, un niño criado por una manada de lobos en la selva, quién a lo largo del relato debe sortear una serie de pruebas para lograr obtener el reconocimiento del “Consejo de la Roca”, un órgano deliberativo de la jungla, cuyos integrantes exigen al protagonista contar con el respaldo de dos miembros del reino animal, desvinculados de su familia adoptiva; el entrañable Oso Baloo y la pantera Bagheera. Con ellos aprende valiosas lecciones, la llamada ley de la manada y la importancia del trabajo en equipo.
El exitoso actor y realizador, Jon Favreau, responde por la dirección de la película, asumiendo el gran reto de convertirla en una pieza donde conviven actores de carne y hueso con figuras diseñadas por computadora. La misión la cumple con creces, a la luz del certero manejo de las nuevas tecnologías. En tal sentido, una obra de una considerable fuerza audiovisual y expresiva. La fotografía corre por cuenta del veterano, Bill Pope. John Debney compone la música original, Justin Marks destaca en el crédito del guión y como responsable de las actuaciones protagónicas, Neel Sethi, una joven promesa de la meca, de origen amerindio.