Una posible discusión sería el móvil del doble homicidio cometido dentro del hotel Marañón, ubicado en el kilómetro 16 de la vía a Quíbor, la madrugada de este lunes. Yannier Javier Echegaray González (19) y Cruz Ramón Fréitez (28), fueron las víctimas fatales.
Según trascendió, los posibles autores de este hecho violento eran conocidos de las víctimas y algunos testigos indicaron que hasta los vieron juntos. Hasta ahora no existen detenidos, pero funcionarios del Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) lograron encontrar el vehículo en donde fueron trasladados los cadáveres.
Se trata de un Hyundai, localizado en estado de abandono en el barrio La Paz. Se encuentra lleno de sangre y aparentemente tiene sus seriales alterados, por lo que se está verificando su procedencia, para determinar a quién pertenece o si había sido robado recientemente.
Los presuntos criminales luego de cometer el doble homicidio montaron los cuerpos en el vehículo y lo trasladaron a dos kilómetros del hecho, y escaparon.
Le avisaron al mediodía
Wencio Rojas se encontraba en las afueras de la morgue. El señor esperaba que le entregaran el cuerpo de su hijo, Brayan José Díaz (28), vigilante asesinado la madrugada del lunes por un compañero en la Zona Industrial II.
Rojas dijo sentirse un poco molesto. Comentó que su hijo había recibido guardia el domingo y le correspondía entregarla la mañana del lunes. El hecho ocurrió en horas de la madrugada y encargados de la compañía le avisaron de lo sucedido al mediodía.
Relató que la víctima apenas llevaba doce días trabajando allí. Residía en el norte de la ciudad y con su muerte queda huérfana una niña de tres años.
Sobre el presunto responsable de este homicidio se conoció que se entregó y quedó identificado como Alfonso Yoel Aponte García (21), a quien se le decomisó el arma y fue puesto a orden del Ministerio Público.
