El slugger Miguel Cabrera conectó su primer estacazo de cuatro esquinas en la actual temporada de las Grandes Ligas para guiar el triunfo de Tigres de Detroit frente a Yanquis de Nueva York con pizarra de 4-0.
La conexión del maracayero llegó en la parte baja del séptimo episodio para poner cifras definitivas al encuentro. El tablazo fue sin compañeros en circulación.
Cabrera remolcó dos de las cuatro anotaciones de su equipo para convertirse en la figura ofensiva y respaldar la gran presentación de Jordan Zimmerman, quien tuvo un debut de ensueño al lanzar siete entradas en blanco, con solo dos hits permitidos, además de tres boletos y tres retirados por la vía del ponche.
El batazo del criollo fue contra el serpentinero derecho Luis Cessa. En conteo de tres bolas y un strike, Cabrera pescó una recta en la zona de poder para enviar la pelota a las gradas de la derecha.
El primer cuadrangular del aragüeño llega en el tercer compromiso de su equipo, que de momento marcha invicto.
En el primer episodio, Cabrera había inaugurado la pizarra con un sencillo productor a la pradera derecha que llevó a la registradora a Ian Kinsler. Ese batazo fue contra el abridor Luis Severino.
Cabrera llegó a tres carreras remolcadas en la actual temporada. Además fue el bambinazo 409 de su carrera en las mayores. También llegó a 1.448 carreras remolcadas desde que se estrenó en la Gran Carpa en 2003.
Esta campaña el slugger persigue guarismos importantes al presentarse la oportunidad de llegar a 2.500 imparables y 500 dobles el mismo año.
De mantenerse saludable y mantener el ritmo mostrado en campañas anteriores, Cabrera no debe tener problema en alcanzar ambas cifras, apenas a los 33 años de edad.
Chacín listo
Jhoulys Chacín realizó su última apertura en Triple A antes de recibir el llamado al equipo grande para integrarse a la rotación de los Bravos de Atlanta.
El derecho marabino tuvo una sólida actuación el pasado jueves por la noche con el Gwinnett en el inicio de la Liga Internacional (AAA).
Chacín completó 7.2 innings en los que recibió cinco imparables, otorgó par de boletos y abanicó a siete. En total realizó 102 envíos al plato.
“Me sentí muy bien. Localicé bien todos mis pitcheos. cayeron bajitos en la zona de strike y gracias a Dios en mi primera salida del año pude llegar hasta el octavo inning”, destacó el marabino según publica el portal de la LVBP.
“No hice nada diferente con respecto al Spring Training. Solo traté de lanzar strikes y pienso que esa fue la clave, mezclé muy bien mis pitcheos”.
“Me siento con mucha confianza. Mi brazo está excelente y si mi brazo está bien, sé lo que puedo hacer en el montículo. La organización me dijo durante la primavera que mi próxima salida sería en Grandes Ligas, así que vamos a ver qué pasa”, dijo el diestro, quien se quedó con el quinto lugar en la rotación de Atlanta.