En estos momentos, la familia venezolana destina más del 69,2% de su ingreso solo para la adquisición de alimentos, quedándole 30,8% para hacer frente al costo de la vida que incluye vivienda, salud, educación y servicios, afirmó el economista y coordinador del Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-Fvm).
Revela además que el 11,9% en gastos de educación pública; el 9,5% se va en vestido y calzado que es un gasto prorrateado durante todo el año; 6,8% a los servicios públicos básicos; 5.400 bolívares por alquiler de vivienda, 2,3% en artículos de higiene personal y en salud, la familia venezolana solamente destina 0,5%, unos 899 bolívares.
Señala que los niveles de escasez, conjuntamente con los altos precios que hay que pagar en el sector informal o en el bachaqueo, hacen también imposible, por cuanto se requieren 12,6 salarios mínimos solo para adquirir los alimento, cuyo precio en el mes de febrero fue de Bs. 121.975,47.
-Si se trata de la Canasta Básica que además de alimentos incluye artículos de higiene personal, educación pública, salud, vivienda para una familia de cinco miembros, hay que disponer de 18,3 salarios mínimos por que el costo de la vida fue en febrero de 176.975,45 bolívares, pero además hemos detectado que dos tercios de la población venezolana empleada en el sector informal, devengan un salario mínimo o muy cerca del salario mínimo, de allí que la restricción viene porque se está restringiendo el consumo de alimentos, comienza a sentirse hambre en algún sector de la población porque es imposible hacerle frente a los altos precios de los alimentos en esta situación de inflación y de escasez-, aseguró en conversatorio realizado en Conindustria.