Esta semana los habitantes de las comunidades de la Batalla, el Bolívar y el Tostao, se encontraron con la noticia de que tenían prohibida la compra de alimentos en el Mercal de Villa Rosa, al cual podrán ingresar sólo los residentes de ese sector, los de La Pastora, Agua Viva, Tierra de Dios y San José de Tintín.
La explicación que recibieron es que ellos debían comprar en la base de misiones y UBCH de sus comunidades, porque al Mercal de Villa Rosa llegaban alimentos acorde para distribuir a los habitantes de la zona.
Tal información generó la molestia de los afectados quienes a las 7:00 de la mañana del martes se concentraron a las afueras del mercado dependiente del Gobierno Nacional, allí protestaron la decisión de la coordinadora y que según Elimar Hernández les respondió que esa eran las normativas.
Hernández señaló que es imposible que ellos compren en las bases de misiones porque hace más de 8 meses que dejaron de funcionar y los consejos comunales no se organizan para beneficiar a las comunidades, por lo que deben comprar en ese Mercal, al que deben llegar a las 3:00 de la madrugada aproximadamente si quieren estar entre las primeras 100 personas y adquirir todos los productos.
Al ver que sus acciones de protesta no estaban siendo escuchadas, los habitantes decidieron movilizarse en rutas o en la parte de atrás de camionetas hasta la avenida Florencio Jiménez, a la altura del Tostao, allí de inmediato cerraron los dos canales con quema de cauchos. Exigían que la directiva regional de Mercal les solventara la situación.
15 minutos pasaron y efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana llegaron al lugar para tratar de abrir paso y evitar un colapso vial. Pero los manifestantes se negaron a ceder porque “el hambre puede más y estamos cansados de ésta situación”, afirmaban en medio de su discusión.
A las 10:00 de la mañana la cola de vehículo era inevitable; conductores de carga pesada y pasajeros haciendo trasbordo, no dudaron en expresar su malestar, ya que consideraban que la solución no estaba en afectar a otros.
Familia sin comida
Yolimar Echeverría, dijo que estaba protestando porque tenía 7 niños que alimentar y no tiene con qué hacerlo. Esta semana no fueron a la escuela porque no tenían para preparar el desayuno.
Afirmó que el pollo y la carne la dejaron de vender hace tiempo, decisión que tomó la coordinadora debido al alboroto que se formaba cada vez que llegaba el alimento. “Hay mucho abuso, ya nosotros debemos prepararnos para pelear por cada producto, porque si no es imposible comprar”.
