En un ambiente tranquilo, distinto al de todos los domingos, laboraban ayer los vendedores del Mercado Municipal Terepaima, quienes acudieron a sus puestos de trabajo para «ver cómo les iba en el día». Los vendedores de carne, a lo interno del mercado, ofrecían el producto entre Bs. 1.350 y 1.500, mientras que los pescaderos «remataban» el seco hasta en un 50% menos del precio en el que se comerció hasta el Viernes Santo.
El pescado seco rayado que vendieron durante la Semana Mayor entre Bs. 2.500 y Bs. 3.500, desde el pasado sábado y hasta ayer domingo se ofertó en Bs. 2.000 y hasta Bs. 1.200, el bagre dorado que tenía similar precio, se podía adquirir en Bs. 1.300.
Mario Aguirre, vendedor, aseguró que «la venta ya bajó». Asimismo, aseveró que en este año se vendió mucho menos que en temporadas pasadas.
Comentario que coincidió con lo expuesto por Ángelo Ortega, también vendedor, quien comentó que debido a las bajas ventas muchos comerciantes se quedaron con «la mercancía varada», razón por la cual desde el pasado sábado y hasta ayer domingo remataron el producto.
Mercancía salada como el babo, de venderse en Bs. 2.500, el pasado fin de semana era rematada en Bs. 1.000 el kilogramo.
El chigüire, el producto más costoso de Semana Santa, era rematado en Bs. 3.000. Sin embargo, durante la temporada lo ofrecieron entre Bs. 3.500 y Bs. 5.000.
-Las ventas ya no son como antes. Quienes el año pasado llevaban cinco kilos de pescado, esta vez compraron tres y los que no apenas un kilo. Dicen que todo está muy caro, se quejan y eso es por la misma crisis.
Ortega calificó la temporada como «regular», mientras otros vendedores se quejaron por quedar con la mercancía «fría» en las mesas.
«Es mejor rematar la mercancía y tener una platica en el bolsillo que no recuperar lo invertido» comento José Villacinda, otro comerciante del lugar, ya que, como también lo comentó Aguirre, «en estos tiempos la ventas están muy difíciles».
Algunos de los vendedores aseguran que seguirán ofreciendo la mercancía salada quedada en el resto de los mercados, aunque después de Semana Santa, la demanda de esta merme considerablemente.
Pescados frescos a la espera
Ortega asegura que después de Semana Santa la venta de pescado fresco también disminuye, tanto o más que en la época de diciembre.
A este comportamiento habitual, se suman los altos precios del rubro, ya un kilogramo de pargo rojo es vendido en Bs. 2.500 y hasta 3.200, mientras que el bagre en Bs. 1.200, lebranche en Bs. 1.500 y el cangrejo en Bs. 2.000. El atún fresco puede oscilar entre los Bs. 1.600 y Bs. 2.500, aún más costoso que la carne roja y el pollo.
Cola para la masa
Aunque los barquisimetanos no compraron pescado este Domingo de Resurrección, sí hicieron la cola para adquirir el kilogramo de masa de maíz blanco o amarillo, bien sea pilado o pelado. Señalaron que lo buscaban porque no tenían harina de maíz precocida y esta era el sustituido.
José Martínez, consumidor, se lamento porque «volvimos a lo de antes”.El kilogramo de esta se vende en Bs.160 y la demanda se ha incrementado en los últimos meses.