La Mujer Maravilla no tendrá un papel principal en «Batman v Superman: Dawn of Justice» («Batman v Superman: El origen de la justicia»), pero logra robarle el show a sus colegas encapotados en la nueva cinta de superhéroes que se estrenó el viernes.
Pese a la popularidad de la serie televisiva de los 70 protagonizada por Lynda Carter, esta es la primera vez que la defensora del lazo aparece en una megaproducción con actores de carne y hueso.
La tarea de interpretar a la guerrera amazónica yace en Gal Gadot, una modelo de 30 años que incursionó en la actuación cuando un agente la vio en una foto y le pidió que audicionara para un papel de chica Bond. No obtuvo ese trabajo, pero con el tiempo eso la llevó a aparecer en la quinta y sexta entregas de «Fast & Furious» («Rápido y Furioso») como Gisele. Aparte de esto, era aun relativamente desconocida cuando se anunció que sería la nueva Mujer Maravilla en el 2013.
Con 1,77 metros de estatura (5 pies con 10 pulgadas), Gadot tiene una presencia imponente tanto en persona como en la pantalla. En el filme, en el que aparece primero como Diana Prince, sus llamativos vestidos ajustados hacen girar las cabezas de muchos personajes, incluido el Bruce Wayne de Ben Affleck.
Gadot se ha mantenido serena sobre las críticas desde el principio.
“Como actriz, mi responsabilidad es no prestar mucha atención a todo el ruido que me rodea sino al guion, al director, y proteger el personaje”, dijo Gadot a reporteros recientemente. Tendrá su propia película en 2017.