Miles de católicos y protestantes conmemoraron el viernes la crucifixión de Jesucristo siguiendo el camino por la Ciudad Vieja de Jerusalén que según la tradición cristiana siguió Jesús hasta la cruz.
La procesión del Viernes Santo pasa por el Camino de la Cruz, conocido como Via Dolorosa, la ruta que según creen los cristianos hizo Jesús hasta el lugar donde fue crucificado.
Peregrinos de todo el mundo, algunos con grandes cruces de madera a la espalda, pasaron por los 14 puntos de la ruta, cada uno marcado con un suceso acaecido a Jesús en su último viaje.
Las últimas paradas se encuentran dentro de la iglesia del Santo Sepulcro, donde muchos cristianos creen que fue crucificado y enterrado Jesús antes de resucitar el Domingo de Pascua.
Las iglesias griega ortodoxa y ortodoxa oriental celebran el Domingo de Pascua el 1 de mayo.