Será muy difícil extraer los datos de las cajas negras de un avión de FlyDubai que se estrelló el sábado en el sur de Rusia, lo que obstaculizará la investigación de la tragedia en la que murieron las 62 personas que iban a bordo, dijo el lunes un alto funcionario de aviación ruso.
Sergei Zaiko, vicepresidente del Comité de Aviación Interestatal ruso y quien investiga el hecho, planteó dudas sobre los dispositivos de grabación de la aeronave.
Declaró a la televisión estatal rusa que las cajas negras del Boeing 737-800 se dañaron hasta el punto en que los expertos no han podido leer los datos de inmediato. Sin embargo, señaló, han copiado la información del dispositivo que registra los datos de vuelo y aún tienen que hacer lo mismo con la grabadora de voz. Una vez hecho eso, los expertos intentarán extraer los datos.
«En circunstancias favorables, obtendremos los resultados preliminares en un mes», declaró Zaiko.
El avión se estrelló y explotó en una enorme bola de fuego antes del amanecer del sábado, en la pista de aterrizaje del aeropuerto de Rostov del Don, cuando intentaba el aterrizaje por segunda vez en medio de fuertes vientos.
Los vuelos a Rostov del Don se reanudaron la mañana del lunes luego del trabajo exhaustivo para recoger los escombros del avión pulverizado y reparar el daño a la pista causado por el desplome, el cual dejó un cráter enorme.
Se desconoce la causa del accidente, pero muchos aviones han tenido problemas al aterrizar en ese aeropuerto debido a los vientos fuertes en el momento de colisionar. La mayoría de los pasajeros eran vacacionistas rusos.