La recuperación del Casco Histórico de Barquisimeto sigue siendo una deuda pendiente de la municipalidad. La obra no termina de concretarse. Al contrario, permanece desplazada, no es prioridad para las autoridades locales y regionales.
Este patrimonio urbano lucha contra el implacable paso del tiempo, presupuestos deficitarios, decretos Avivir, escasez de recursos y materiales, producto de la crisis que experimenta el país. La voluntad no es suficiente para recuperar la zona, comenzando por las casas situadas en la acera de la calle 24 con carrera 17.
Si bien existen proyectos para la recuperación del casco, así como informes técnicos que determinan su vulnerabilidad, buena parte de la tarea sigue sin materializarse.
En reiteradas oportunidades las personas afectadas y la Fundación Amigos del Casco Histórico de Barquisimeto, se han pronunciado para exigir el inmediato rescate del centro fundacional de Barquisimeto, sin mayores logros.
Por ahora está a la vista la parsimoniosa recuperación de la sede de la Fundación Sociedad Amigos de Barquisimeto (Fundasab).
Yuyita de Chiossone confirma que los trabajos de las otras casas, propuestos por el IMVI, no avanzan, aunado a que los inmuebles volvieron a llenarse de comején, plaga que en un principio había sido controlada por iniciativa del Colegio de Abogados y el apoyo de malariología, sin embargo, la fumigación no fue constante y por ello las casas se cundieron nuevamente.
A la deriva
“Nos sentimos a la deriva, no entendemos como los propietarios de las casas de la avenida Uruguay reciben un tratamiento diferente. A exepción de Fundasab, todo está paralizado”. La situación es preocupante, agregó.
Las casas de la acera de la calle 24 están protegidas por dos decretos presidenciales y por un decreto del Instituto de Patrimonio Cultural (IPC).
De Chiossone añadió que la Fundación Amigos del Casco Histórico designó una comisión para retomar y actualizar el diagnóstico y las propuestas del proyecto Circhal que en el pasado apoyó la municipalidad y en el que participaron diversos especialistas y representantes de varias casas de estudios.
“Queremos retomarlo y presentarlo al Consejo Consultivo de la Ciudad para la pronta revitalización de la zona. Sobre todo cuando se acerca la temporada de lluvias”.
Reiteró que sigue la inacción de todas las autoridades.
“La voluntad sola no resolverá nada. Hace falta cristalizar los hechos. Si esto no se toma con seriedad en un futuro próximo no va a ver nada que rescatar y eso será muy doloroso para los propietarios y los larenses. Sería muy triste que esta administración, que dice atender los problemas de la ciudad, perdiera el casco histórico”.
Desde hace dos años la afectada procura el rescate de las casas de los Vásquez, Gil París y Garmendia, así como el de su propia vivienda.
Recordó que hace dos meses la fundación le pidió a Hidrolara colaborar con el estudio de las aguas subterráneas de la carrera 16 y 17, así como de la Plaza lara y calle 24, uno de los principales problemas que afecta al casco.
