Un equipo de veterinarios de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA) investiga la causa exacta de la muerte de la osa frontina Chiquinquirá que vivía en el Parque Zoológico y Botánico Bararida.
El gerente de manejo y salud animal del Bararida, Darío Herize, explicó que Chiquinquirá falleció el pasado 17 febrero y al realizarle la necropsia descubrieron que había sufrido una neumonía por aspiración de agua, es decir, ahogamiento. El veterinario Herize afirma que es imposible que un oso frontino muera por ahogamiento porque una de sus características principales es ser excelente nadador.
“En este momento hacemos los exámenes hisopotológicos para determinar la causa definitiva de muerte. Es posible que haya sufrido un infarto que la dejara inconsciente y eso generó el ahogamiento, otra explicación es que sufriera un desmayo o se cayera y se golpeara la cabeza y quedara inconsciente. De manera consciente no pudo ahogarse”, explicó Herize.
Expresó que no habían dado una declaración oficial sobre el caso porque estaban esperando a tener la causa exacta para informar a la población con precisión.
Chiquinquirá hizo un valioso aporte a la conservación de esta especie. Nació en 1997 en el Parque de Paraguaná, estado Falcón y en el 99 la trasladaron al Bararida con el propósito de aparearla con Andy, con quien tuvo cinco crías, entre machos y hembras, que hoy son la esperanza para continuar con el proceso de reproducción en Venezuela.
Pese a la irreparable pérdida, el Parque Bararida sigue teniendo la población más numerosa de osos frontinos en cautiverio de Venezuela, con cinco miembros: Guamito, que fue rescatado de la vida silvestre; Andy, el macho de Chiquinquirá. Los otros tres son: Dinta, hijo macho de Andy y Chiquinquirá, además de las dos hijas hembras de la pareja. Herize invitó al público a visitar el parque.