El papa Francisco conmemoró el domingo el tercer aniversario de su papado reforzando su mensaje de la importancia de la misericordia y entregando 40.000 ejemplares del Evangelio de San Lucas.
Unas monjas que trabajan en la clínica pediátrica gratis del Vaticano, y unos abuelos residentes de Roma, entregaron los ejemplares en la Plaza de San Pedro.
Francisco inició su papado en el 2013 enfatizando la importancia de la misericordia como algo más importante que la normativa moral, y lo está reforzando en este año que ha declarado como el Año de la Misericordia.
Francisco le contó a la multitud en la Plaza de San Pedro la historia de la mujer adúltero que Jesús se negó a condenar.
«Esta mujer nos representa a todos, adúlteros ante Dios, traidores de su confianza. Y su experiencia representa la voluntad de Dios para todos nosotros: No es la condena, sino la salvación a través de Jesús».