Seis personas perdieron la vida durante una jornada sangrienta en las calles de Filadelfia.
La violencia comenzó el martes por la tarde cuando, según la policía, un hombre apuñaló a tres personas al azar, matando a una y enviando a las otras dos al hospital. El sospechoso fue detenido pero aún no se han presentado cargos en su contra.
Unas horas más tarde, una persona murió y otra quedó herida grave en una balacera, dijeron investigadores.
En las horas siguientes, cuatro personas más fueron asesinadas en otros tantos tiroteos, agregó la policía.
No se han realizado detenciones en relación con ninguna de las balaceras.
Todos los asesinatos tuvieron lugar en vecindarios distintos, y la policía no explicó si algunos de ellos estarían conectados.