Motivado por las recientes declaraciones e imputaciones en contra de Corporación Alianza C. A. e Hiper Líder Cabudare C.A. el representante legal de la marca para Centroccidente, Elvio Catanho, niega que la empresa haya incurrido en actos de terrorismo o agresión en contra de los habitantes de la urbanización Villa Granda. Aseguró que tampoco han destruido paredes perimetrales que se encuentren fuera de su terreno.
Al relatar los hechos, Catanho indicó que los derrumbes que la compañía realizó se encuentran dentro de sus linderos, legalmente determinados. Se trata entonces de paredes que ilegalmente forman un segundo patio de 18 de las 22 unidades habitaciones de la urbanización, en los terrenos de Híper Líder.
En total son 1.800 metros cuadrados de terreno que serían dispuestos para la ampliación del estacionamiento y tienda, además de la construcción de almacenes de la compañía, lo que les permitiría prestar un mayor y mejor servicio.
Lamentó que por el bloqueo de 18 particulares se deje de beneficiar a 75 mil clientes semanales.
Búsqueda de conciliación
Relató que desde 2013 han intentado mantener reuniones conciliatorias con los habitantes de la urbanización, incluso plantearon resarcir las pérdidas. También hubo intermediaciones de la División de Planeamiento Urbano y la Sindicatura Municipal, sin resultados positivos.
Propiedad del terreno
Catanho explica que al adquirir los terrenos en 2013, conocían de la referida situación. No obstante, el dueño anterior les había participado que en 2008 introdujo un interdicto de amparo a la posesión que fue declarado con lugar en 2009.
Para la fecha los habitantes de Villa Granda habían comenzado a construir en dicho terreno, sin lograrse la restitución formal de los linderos, a pesar de la decisión del tribunal.
El representante de la compañía acotó que para el momento de la adquisición, el terreno también era ocupado por consejos comunales, que exigían fuesen estos decretados como Avivir. Sin embargo, Corporación Alianza logró pactar con ellos el desalojo.
Permisos al día
Catanho sostiene que todas las construcciones realizadas por la compañía han contado con la permisología debida y están adecuadas a las normas urbanas.
Acotó que el día del derrumbe no habían personas en el lugar y agregó que el urbanismo no se encuentran desamparado, ya que las paredes originales no han sido afectadas por la compañía.