El final menos deseable parece concretarse. El cadáver parcialmente calcinado de una mujer fue localizado ayer en la tarde a un lado de la carretera vieja hacia Carora, a la altura de Padre Diego, y la única mujer reportada como desaparecida es Marina del Carmen Peña (61) raptada el miércoles 24 de febrero, aunque hasta ahora los familiares no la han reconocido.
Del cuerpo solo se aprecia una parte del abdomen, pierna izquierda y cabellos, entre colores cobrizos y plateados por las canas, propias de una dama de la tercera edad.
La zona es desolada, la casa más cercana queda a unos tres kilómetros, nadie se había percatado de la presencia del cadáver sino hasta ayer a las 3:00 de la tarde, cuando un motorizado se detuvo a observar en el barranco porque sentía un olor fétido. Se espantó al ver el cuerpo sin vida de la mujer y notificó al 171.
Se requirió el apoyo de efectivos del Cuerpo de Bomberos de Iribarren para la remoción del cadáver. En horas de la tarde, el equipo reporteril de EL IMPULSO se comunicó con la hija de Marina del Carmen Peña, ella ya estaba enterada del hallazgo del cuerpo de una mujer, pero estaba a la espera de ser notificada por parte del Cicpc para la difícil tarea de la identificación.
Pese a la dificultad por lo descompuesto del cuerpo y la ausencia de la piel en el rostro, hay evidencias importantes como el cabello y los restos de tela de color morado, igual a la camisa que cargaba la señora Marina el día de su desaparición, pero serán necesarios los exámenes forenses.
También se aprecia un colmillo en la dentadura superior y todos los dientes de la inferior, un análisis al patrón dental permitiría la identificación de la víctima.
Desaparecida por delatar a homicidas de su esposo
Marina del Carmen Peña denunció públicamente a los autores de la muerte de su esposo Juan Bautista Marín Vásquez, de 55 años, ocurrida el 5 de enero de este año. Al cauchero lo raptaron en El Malecón, asesinaron y abandonaron en Las Tunas, norte de Iribarren.
La señora y el resto de sus familiares señalaron a los integrantes de una banda delictiva denominada “Condorito”, y abiertamente dijeron que dos funcionarios de la Policía del estado Lara eran los autores.
La dama estaba amenazada, incluso sufrió un atentado un día antes de su desaparición le dispararon desde un carro, cuando caminaba por la calle 42 cerca del Terminal de Pasajeros, pero los proyectiles afectaron en el rostro a una joven.
Al día siguiente, cuando Marina salió de su casa y se dirigía hacia la Fiscalía para denunciar el atentado, la raptaron.
Cuando los parientes llamaron a su teléfono celular contestó un hombre, y luego de un cruce de palabras confesó: “Sí, la tenemos, y no la vamos a soltar por sapa”.
Varios integrantes de la misma familia han sido asesinados por una rencilla que existe entre los integrantes de El Condorito y sobrinos de Juan Bautista, esposo de la señora Marina.
Confirmación
Se espera que hoy los familiares de Marina acudan a la morguecita de Barquisimeto para el acto de reconocimiento.
En horas de la noche nuevamente el equipo de EL IMPULSO contactó a los allegados y se mantenían esperanzados de que su familiar se encontrara con vida y el cadáver perteneciera a otra persona.
A una cuadra de distancia estaba otro cadáver
En la misma zona en donde fue abandonado el cadáver de la dama, pero a unos 100 metros de distancia, estaba otro cadáver. Se trata de un hombre de piel morena, tenía puesto bóxer grises y un jean azul claro bajado hasta las rodillas y sin camisa. No portaba identificación.
Por el aspecto del cuerpo, aparentemente había permanecido allí unos tres o cuatro días, estaba en una zanja en donde le daba sombra.
Al sitio del hallazgo se acercaron los familiares de José Daniel Rivas, un joven de 26
años, desaparecido desde el lunes 29 de febrero en Alí Primera. La mamá del mototaxista
alzó los brazos hacia el cielo y exclamó ¡No es, gracias a Dios no es mi hijo!
El cuerpo fue llevado hacia la morguecita del Cementerio Nuevo y se espera que sus dolientes lo identifiquen en el transcurso del día.