La situación política del país está complicada, porque ya se sabe que el Tribunal Supremo de Justicia y en especial la Sala Constitucional, está abiertamente parcializada en favor de los intereses del gobierno, declaró el Dr. Manuel Rachadell, abogado constitucionalista y profesor de la Universidad Central de Venezuela, quien fue entrevistado para EL IMPULSO. Pero, de ese punto a eliminar la voluntad popular hay mucho trecho. El país puede encontrar salida a la crisis, entre varias de las que se están anunciando.
-¿Cuál considera la más adecuada?
-A mi, particularmente, me gusta la idea de ir con dos salidas al mismo tiempo: la enmienda constitucional y el referendo revocatorio.
-Pero, ¿no cree que el gobierno, a través del CNE y el TSJ, podrían poner trabas, ya que el primer vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello, ya ha anunciado que todas las fórmulas que presente la Asamblea Nacional serán rechazadas y negadas?
-Claro que podrán haber dificultades. Indudablemente, habrá oposiciones a todas las propuestas de la Asamblea Nacional, pero habrá que seguir adelante. No podemos pararnos. Al final, el pueblo es el que va a decidir qué es lo que quiere.
-Suponiendo que el TSJ se pronunciara contra la enmienda o el revocatorio bajo cualquier argumento, ¿qué se podría hacer?
-El TSJ no puede oponerse. En forma antijurídica podrá hacerlo.¿Cómo podría declarar que una enmienda constitucional es inconstitucional? Eso es absurdo, no tiene lógica. Sería como decir que la constitución está errada. Los magistrados no tienen ninguna vergüenza para utilizar argumentos carentes de lógica y de sustento en el derecho. Pero, la democracia tiene el país en sus manos. Tiene a los electores y es por eso que la fuerza mayoritaria en la Asamblea Nacional tiene que ser audaz y seguir adelante.
Con esas dos posibilidades, la de la enmienda y la del referendo revocatorio, que son dos opciones totalmente constitucionales y aplicables en los momentos, se le puede demostrar al país que hay la firme disposición de la Asamblea Nacional a cumplir con la decisión tomada el 6 de diciembre, que fue la de buscar un cambio de gobierno.
Más de dos terceras partes de los electores que se pronunciaron por el cambio de gobierno, a pesar de todas las actuaciones ventajistas del oficialismo, no es poca cosa.
Ese enorme volumen de votos que obtuvo la Unidad Democrática se convirtió automáticamente ese día en un mandato de la población.
Ahora es una obligación la que tiene la oposición al régimen de presentar las posibilidades, para que se decida qué es lo que el pueblo confirme lo que quiere.
-¿En cuánto tiempo se podría realizar ese proceso electoral de enmienda y revocatorio?
-La idea es que como deben realizarse elecciones de gobernadores en diciembre, podrá también llevarse a cabo esa consulta popular.