El lunes después de confirmar que el aumento de precios de los semestres en las diferentes carreras que dicta la Instituto Universitario Antonio José de Sucre superaba el 100%, los estudiantes cerraron las puertas y se negaron a cancelar las nuevas tarifas.
Explicaron que de 650 bolívares que pagaron por cada cuota en el semestre anterior ahora deberán cancelar 3.500 bolívares mensual aproximadamente, para un total de 23.500 bolívares, lo que para los estudiantes significa un aumento exagerado y desconsiderado, tomando en cuenta las condiciones en que se encuentra la sede.
Mientras obstaculizaban la entrada para que no ingresaran demás estudiantes a formalizar las inscripciones, los protestantes aclararon que están conscientes de la crisis del país y de los nuevos ajustes de sueldos que anunció el ejecutivo nacional, pero a su juicio el instituto no brinda buenos beneficios para justificar las acciones económicas; ni para el personal ya que ganan salarios bajos, ni para la comunidad estudiantil porque aunque les cobran un porcentaje por servicios médicos en la práctica no lo disfrutan.
La biblioteca desde hace un año no funciona, al parecer fue cerrada por problemas de contaminación, según lo relatado por los mismos alumnos.
Al realizar un recorrido por las instalaciones se constató que los baños se encuentran en mal estado, sus lavamanos no funcionan y es evidente la falta de limpieza, que impide a los alumnos realizar sus necesidades.
Belys Torrealba, estudiante, dijo que constantemente le hacían aumentos para cursar nuevos semestres, pero estaban entre 10% y 30%, nunca había sido tan elevado. “Estamos dispuestos a seguir aquí protestando todo el día, hasta que la directiva evalúe y baje el costos, porque son impagables”.
Neptalí Silva, afirmó que las acciones se extenderá hasta 15 días, en los que un grupo acudirá hasta el Consejo Legislativo del estado Lara (CLEL), la Inspectoría del Trabajo y la Defensoría del Pueblo para que intercedan y no se les vulnere el derecho a la educación a través de medidas económicas desproporcionadas.