David Ricardo López Gutiérrez (20) vivía con sus padres en el sector El Jebe, sus actividades diarias consistían en ayudar a su papá en el taller mecánico ubicado en la calle 43 entre 26 y 27, lo que hacía desde que terminó el bachillerato. Uno de sus tíos lo describió como un “muchacho sano y trabajador”.
La noche del sábado se encontraba en una fiesta en el callejón 1 de San Benito, sector ubicado al lado de la entrada de El Jebe. Música con alto volumen y consumo de bebidas alcohólicas era lo que reinaba en la vivienda donde se realizaba la celebración por un grupo de personas, dijeron habitantes de la comunidad.
Pasadas las 2:00 de la madrugada se escucharon varias detonaciones, algunos vecinos dijeron que fue en la fiesta; donde posiblemente se haya registrado una discusión entre los presentes y uno de ellos decidió accionar su arma en varias oportunidades contra López Gutiérrez.
Después de cometer el crimen, al parecer los sujetos salieron corriendo hacia la parte de arriba del sector y se perdieron en medio de la oscuridad. Uno de los residentes aseguró que el cuerpo fue sacado de la vivienda para dejarlo tirado en la entrada del callejón 1 y evitar averiguaciones dentro de la casa donde ocurrieron los hechos y sus propietarios.
Sin embargo, otra versión señala que al joven de 20 años lo venían persiguiendo por la avenida principal y éste trató de esconderse pero los impactos de bala lo alcanzaron y cayó sin vida en la entrada del callejón.
Al hecho llegaron funcionarios del Eje de Homicidio del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) para hacer el levantamiento del cadáver, la versión que ellos manejan es el móvil de la venganza.
Familiares la mañana del domingo esperaban a las afuera de la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda que el cuerpo fuese entregado, mientras sus padres realizaban los trámites legales con el Cicpc.
Su tío en medio del dolor afirmó que él nunca anduvo en malos pasos, ni actos delictivos, por lo que le parece extraño lo sucedido, pero no descartó que sus andanzas por San Benito se debiera a una relación sentimental que tuviese López Gutiérrez. Para él esa es la única explicación.
Dijo que los planes que tenía su sobrino era inscribirse en la Universidad Fermín Toro para estudiar la carrera de derecho.
