Muchos de ustedes, nuestros lectores, son verdaderos amantes de la cocina, mientras que otros, aunque son de esas personas que llamamos “buen diente” no se atreven ni a freír un huevo. Sea cual sea su caso, este artículo es de interés público, pues en las siguientes líneas daremos unos cuantos tips que, sin duda alguna, le facilitarán la vida hasta al más experimentado de los cocineros
El mundo de los fogones es un asunto tan complejo como divertido, un universo de ingredientes que, con sus respectivos sabores, aromas y colores, convierten un simple plato en una fiesta de sensaciones en la que el invitado principal es el comensal, quien tendrá la oportunidad de recorrer el mundo entero con tan sólo un bocado, experimentar las más gratificantes emociones al nomás percibir el olor de un platillo e, incluso, volver a su niñez con recetas que rememoran épocas pasadas.
Sin embargo, por mucho que nos guste la cocinadera, hay unas cuantas cosas que nos hacen pensarlo dos veces antes de invitar a nuestros amigos a comer en casa, pasos que debemos seguir si queremos que todo quede delicioso aunque nos quiten mucho tiempo. Pensando en esos casos, daremos a continuación unos cuantos consejos que seguramente les facilitarán la vida, harán más cordial su relación con el mundo de los fogones y les abrirán la mente a una nueva dimensión de la gastronomía.
Cómo si viniera del Federal
Nadie se resiste a los encantos de un delicioso jojoto recién sancochadito, su aroma seduce hasta al más exigente de los paladares y su sabor, combinado con un poquito de mantequilla, es una de las cosas más deliciosas del mundo. Sin embargo, todos detestamos esos molestos pelitos que se apoderan de nuestra mazorca y que son súper fastidiosos de quitar, esos que si son demasiados nos hacen hasta perder las ganas e ignorar el antojo. Para la tranquilidad de muchos, a partir de hoy eso es cosa del pasado, pues les contamos que para retirar esas hebras fácilmente, sólo deben usar un cepillo de dientes viejo y así tendrán un maíz peloncito y listo para comer.
El marinado correcto
Si no somos verdaderos expertos en la cocina, es completamente normal que no tengamos muy claro cuánto tiempo debe durar nuestra carne marinándose y, aunque muchos piensen que es algo irrelevante, la verdad es que se trata de un asunto fundamental si queremos que el resultado final sea lo más parecido a la perfección.
A continuación, los tiempos correctos de marinado dependiendo del tipo de proteína que vayamos a cocinar.
-Pescados y mariscos: Mínimo 15 minutos y máximo 30
-Pollo: Mínimo 30 minutos y máximo 6 horas
-Carne de res, cordero y cerdo: Mínimo 4 horas y máximo 12
La frescura ante todo
Si eres de los que aún no sabes cómo reconocer un pescado fresco y dudas cuando el pescadero te dice que está recién sacadito del mar, te acabas de convertir en el candidato ideal para leer este pedacito de texto, así que presta mucha atención y aprende que un pescado está fresco cuando…
… La carne del animal se siente firme al tacto.
… Huele bien y no tiene olores parecidos al amoníaco.
… Sus ojos aún están saltones y brillantes.
… Las agallas se ven firmes y rojizas.
… Las escamas están relucientes.
… Su color brilla con luz propia como si todavía estuviese mojado.
Cuestión de protuberancias
El tema de los pimentones es un tanto más complejo de lo que pensamos. No es que sea algo del otro mundo ni mucho menos una cuestión de vida o muerte, pero sí sería chévere que supiéramos al menos cuándo tenemos en nuestra tabla de picar un pimentón de esos dulcitos y cuándo estamos ante la presencia de uno de esos que tiene cierto toque amargo.
En todo caso, la cosa es tan sencilla como ver cuántos bultitos tiene nuestro pimentón, pues si tiene sólo 3, hemos corrido con la suerte de haber comprado de los dulces que resultan ideales para preparar ensaladas crudas, pero si por el contrario descubrimos que tiene más protuberancias, generalmente 4, tenemos un pimentón más amargo, de esos que son perfectos para hacer guisos.
Saliendo del horno…
Seguramente ya sabes que la repostería es mucho más estricta que la cocina salada, y es que aunque no lo creas en las preparaciones dulces los pequeños detalles son los que marcan la diferencia, pues cualquier tontería que se pase por alto o una leve diferencia de gramos puede hacer que las cosas salgan muy mal.
Es por esto que hoy te contamos que debes estar muy pendiente de la temperatura de la mantequilla si vas a hacer algo que amerite ser horneado, pues este ingrediente es uno de los principales responsables de darle a tu biscocho, galleta o panecillo la textura adecuada. Para las tortas o ponqués la mantequilla debe estar bien fría y con consistencia fuerte, mientras que en el caso de las galletas lo ideal es que esté a temperatura ambiente, pero no demasiado blanda.
¡No más cortadas!
A la hora de cortar los ingredientes que utilizaremos en nuestras preparaciones, es fundamental tener las manos en las posiciones adecuadas para así hacerlo de la manera más segura posible. De hecho, esa es una de las primeras cosas que les enseñan a los cocineros profesionales
y es por eso que son tan rápidos, diestros y casi nunca se cortan.
-El pulgar debe presionar la parte superior de la hoja del cuchillo.
-Con la otra mano, agarra lo que estés picando, úsala como guía y mete los dedos mientras lo sostienes para evitar accidentes.
-El nudillo del dedo índice de la mano que está sosteniendo tu ingrediente, debe descansar sobre un lado del cuchillo.
Para salir de la rutina
Para hacer las cotufas de una manera diferente, coloca el maíz en una bolsa de papel marrón común y corriente, de esas de panadería, ponle unas goticas de aceite, un poco de sal y mételas en el microondas tal y como lo harías con esos paqueticos prefabricados que compras por ahí. Pero ahora, es momento de innovar y sorprender con unas cotufas fuera de lo común, así que atrévete y agrégales…
-Paprika y perejil
-Comino y pimienta
-Pesto y parmesano
-Aceite de oliva, ajo y peperoncini
-Mantequilla y BBQ picante
-Sazonador de sopa ramen
-Limón y chile
-Tomates secos pulverizados, parmesano y albahaca
– Ají dulce seco y azúcar morena
– Queso feta, orégano y pimienta
– Canela, azúcar nevada y nueces trituradas
Entre una cosa y la otra
-Si te molesta el corazón de las fresas, sólo debes clavarles un pitillo justo en el centro para quitárselo fácilmente.
-Ya pasó la Navidad, pero nunca está de más saber cómo calentar una hallaca en el microondas, para lo cual lo único que necesitas es meterla dentro de una bolsa plástica con un poquito de agua y ponerle 5 minutos.
-Para pelar los huevos sancochados con mayor facilidad, sólo debes agregarle un poquito de bicarbonato de sodio al agua donde los cocinarás.
-Si has cocinado tanto que las manos te quedaron oliendo a cebolla o ajo y ya no encuentras qué hacer para quitarte ese desagradable olor, te recomendamos lavártelas con un poco de bicarbonato de sodio y la peste desaparecerá.