@Annieliciouss me envió una foto por Instagram donde se ve a una señora que iba muy cómoda enviando mensaje de texto en la parte de atrás de un rapidito, y llevaba la puerta abierta, porque seguramente no cerraba bien.
Con una mano de agarraba del carro y con la otra tenía el teléfono en la mano, brazo con el que sostenía la puerta de la ranchera con el codo, de manera que no se abriera por completo.
Aquí es donde me pregunto que en dónde está la seguridad de las personas, cómo puede un transportista permitir estas cosas, sabiendo que si a esa señora le hubiera pasado algo, él habría sido el culpable.
Entiendo que muchas veces tenemos necesidades de llegar rápido a la casa, pero yo no arriesgaría mi vida por eso y esperaría el siguiente ruta o carrito por puesto.
Este fue el comentario de Annie: “Un rapidito en el semáforo del Parque del Este, vía a El Ujano, lleva a sus pasajeros como sardina en lata con la puerta de la maletera abierta y esta señora apoyada de esa puerta abierta, muy relax mandando mensajes”.