Volvió a ponerse su capa y voló como ninguno. Demostró que la gravedad no es problema. Dejó claro quién es el mejor del mundo. Zach LaVine volvió a ganar el Slam Dunk de la NBA de este año con una apoteósica participación.
El jugador de los Timberwolves desde el comienzo dejó claro que iba para refrendar su título. En el camino se midió contra Aaron Gordon, Will Barton y Andre Drummond, en las semifinales.
La última ronda quedó solamente entre Zach y el jugador del Orlando Magic, quienes se batieron en un gran duelo en el que solo uno podía salir victorioso y ya conocemos su nombre.
Estas son las clavadas que dejaron a LaVine con un marcador de 50 + 50 +50 + 50 = 200, mientras que Gordon se quedó abajo por tres puntos al sumar 50 + 50 +50 + 47 = 197.