A su sobrina Blanca Cecilia de Oropeza, dedico
Hay personas cuyo éxito no puede medirse a la luz de episodios fulgurantes donde los destellos ocasionales quedan grabados como una leyenda en la memoria. Hay personas a quienes tenemos que aplicar el criterio de Bertolt Brecht según el cual los hombres imprescindibles son quienes transcurren toda su vida en una lucha permanente. Es precisamente dentro de esta clasificación que entra el médico veterinario Eladio Andueza Castillo, un caroreño raigal que estudió en el Grupo Ramón Pompilio Oropeza, en el liceo Egidio Montesinos y durante toda su vida profesional ha tenido a su pueblo como norte y destino.
Nació en 1938 y se graduó de veterinario en 1963, tiene estudios de posgrado en la UCV en genética y reproducción animal, conocimientos que ha puesto al servicio a la creación, consolidación y fomento del ganado bovino Raza Carora durante varias décadas ininterrumpidas, lo cual agradece Asocrica con el justo homenaje de poner su nombre a las jornadas científicas que se realizarán el próximo mes de marzo.
La pasión de Eladio Andueza le nace porque desde niño fue ordeñador y vaquero en la finca de su familia en el Cerro El Salvaje, donde también fue amansador de mulas y caballos y según Iván Ferrer, cronista de misterios y soledades instalados en la Serranía de Baragua,fue también el niño Eladio intrépido excursionista que perseguía a media noche a los temibles y míticos Salvajes, animales de leyenda que secuestraban a jóvenes doncellas para convertirlas en sus parejas en las ramas de los arboles más altos.
Presente en las brumas de viejos recuerdos, presente como veterinario en la edad de oro de la ganadería caroreña, presente en los procesos de modernización que incluyeron la inseminación artificial, presente, siempre presente Don Eladio Andueza es figura emblemática de la Raza Carora. Siempre esta ahí para quien lo necesite y es tan envolvente su presencia, dice Julio Cesar Álvarez, que incluso nunca se sabe si alguna vez se ha enfermado o tomado vacaciones.
Un rasgo importante de la personalidad de Don Eladio Andueza es que atiende con preferencia a los pequeños y medianos ganaderos, a quienes dispensa un trato solidario en todos los aspectos, incluyendo el mantener honorarios profesionales sin ajustes inflacionarios. Pagarle a Eladio es un problema, dice Rolando Herrera, porque uno tiene que andar preguntando a otros veterinarios cuales son las tarifas actualizadas de sus servicios para cancelarle lo justo.
Pero todo este tejido de anécdotas y reconocimientos a su labor son simplemente pinceladas de su personalidad de hombre útil, ajeno a querer convertir su profesión en un negocio y ser antes bien, un guía académico, operativo y científico para el mejoramiento integral de muchos pequeños ganaderos que gracias a su colaboración han crecido en la calidad del manejo de su rebaño y en el incremento cuantitativo de sus reses.
Muy merecido el homenaje que le rinde Asocrica a este caroreño cuya utilidad para su pueblo ha sido múltiple, llegando incluso a ser por pocos años Presidente del Concejo Municipal, rol que ocupó con dignidad y dejando ejemplo de humildad y honestidad a toda prueba. Nuestro salido respetuoso a Eladio Andueza Castillo, Don Eladio, siempre presente en las luchas caroreñas de las últimas décadas. Dios lo mantenga sano y activo por muchos años mas.
