Los Guaros de Lara (9-5) afrontarán este sábado 13 y domingo 14 la visita al más inexpugnable de los escenarios para su historial como franquicia, el gimnasio Luis Ramos de Puerto La Cruz, para reeditar la final de la campaña 2015 de la Liga Profesional de Baloncesto (LPB) en una serie de dos encuentros contra los campeones defensores, Marinos de Anzoátegui (10-4).
En una revisión al registro de por vida del quinteto, que se unió al circuito bajo esta denominación en 2003 en reemplazo de los Bravos de Portuguesa, los Guaros tienen balance negativo de 16-46 contra Marinos y de 1-30 cuando se trata de partidos de ronda regular en la llamada “Caldera del Diablo”, según estadísticas aportadas por el periodista Jean Carlos Arias Troisi.
Los larenses, que buscan dar el paso extra y convertirse por primera vez en campeones de la LPB, bien podrían darse un buen envión anímico y mandar un mensaje al resto del circuito si logran romper una racha de de 26 encuentros sin ganar en tierras orientales que data del 9 de abril de 2005.
EL IMPULSO reseñó aquel triunfo en su acostumbrada tabla de anotación de la página B1 con resultado favorable a Guaros 85-72 y parciales de 13-13, 27-24 (40-37), 19-28 (59-65) y 32-11. Aquel año ambos quintetos serían los protagonistas de la gran final.
No obstante, el Guaros que ganó esa noche no fue ese que le opuso resistencia en la serie decisiva al acorazado sino el de la primera mitad, que marchaba en el último puesto y coqueteaba con la eliminación hasta que Néstor Salazar recibió nuevas armas.
No fueron los Marcus Hatten, Brant Bailey o Terrence Shannon quienes celebraron en la “Caldera” sino Lee Benson, con 28 puntos y el base larense Diego Guevara –hoy en la otra acera- con 19. En aquella gira también estaba el ahora integrante del cuerpo técnico Cruz Salcedo junto a Antwon Hall, Earl Ike, Armando Becker, Alexander “Coco” Tovar, Johan Piñero, Vladimir Heredia, Randy Vásquez y un muy joven Francisco Centeno (entonces inscrito como José Eligón).
Aquellos Marinos tenían a Jermaine Walker, Harold Arceneaux, Thalamus McGhee, Axiers Sucre, Ernesto Mijares, David Cedeño, Manuel Briceño, Kervin Bracho, Derwin Ramírez y el joven Jesús “Zancudo” Centeno. Luego llegaría Héctor “Pepito” Romero. A casi 11 años de aquella jornada, Guaros tratará de sacudirse el maleficio del puerto y parece tener las armas para lograrlo.