Los Venados de Mazatlán (México) anotaron seis carreras en el octavo episodio para romper el empate en la pizarra y conducirse a una victoria por 8-4 ante los Cangrejeros de Santurce (Puerto Rico) que les permitió mantener el invicto, en vísperas del crucial enfrentamiento de este sábado por la fase de semifinales.
Los aztecas inclinaron de su lado un encuentro que fue parejo, un auténtico toma y dame, hasta que se produjo el mencionado racimo de seis anotaciones una entrada antes del final, ya con el pitcheo boricua dando señales de cansancio.
Cyle Hankerd emergió desde el banco para conectar un largo batazo por el jardín central, por encima del patrullero, que se convirtió en doble y fletó a dos de los tres corredores que para el momento estaban en circulación. Fue el batazo clave del encuentro y que permitió contener una posterior arremetida de los puertorriqueños.
Mazatlán, el equipo más completo del actual clásico caribeño, cerró la primera ronda con marca inmaculada de 4 triunfos y ningún revés, ocupante de la primera casilla y con el beneficio de enfrentar esta noche al último de la tabla.
Los mexicanos corrían el riesgo de perder la primera plaza si eran dominados por los boricuas, razón por la cual su manager echó mano de sus piezas estelares en la parte final del compromiso.
El relevista Efraín Nieves fue responsable de toda la furia del ataque manito en el mencionado octavo episodio para cargar con la derrota. Aceptó seis hits e igual número de marcas en un flojo trabajo, que, de paso, dio al traste con la buena labor de su antecesor Hiram Burgos, abridor de Puerto Rico y responsable de solo una anotación.
Jesús Barraza, en labor de relevista, se llevó el triunfo, luego de laborar una entrada y un tercio con tres hits y una rayita aceptada. Arturo López fue el iniciador de los mexicanos y completó un buen trabajo de seis entradas, pero no optó a la decisión favorable, porque el duelo estaba nivelado cuando se marchó.