El Tribunal Supremo de Justicia puede revisar los actos del resto de los poderes públicos, afirmó este viernes la presidenta del Poder Judicial, Gladys Gutiérrez.
El razonamiento de la magistrada, expresado en el marco del acto de Apertura al Año Judicial 2016, sostiene que tal facultad se la confiere su definición de «supremo», lo que esta establecido en una sentencia de la Sala Constitucional fechada en 2000.
«Siendo que el tribunal supremo de justicia tiene carácter supremo, como lo dispone el artículo 335 de la Constitución, la supremacía del órgano supone la no revisibilidad de sus actos, y esto porque la supremacía por definición excluye la posibilidad de recurrir a un órgano superior (…)así, el Tribunal Supremo de Justicia tiene plena facultad para revisar los actos de los órganos de rango constitucional», citó Gutiérrez.
En esto orden de ideas, la presidenta del TSJ recalcó el carácter «de gran preeminencia» que tendría el Poder Judicial dentro de la estructura del Estado, que a su juicio le sitúa en «una posición única respecto al resto de los poderes, toda vez que se le ha encomendado la función de juzgar eventualmente sus actuaciones».
Observó que el TSJ obtiene su legitimidad en el pueblo, al considerar «el imperativo de la participación popular en la designación y ejercicio de la magistratura y de otra parte por la elevación de las exigencias académicas y laborales para tales acciones», con lo que se refirió a la constitución del Comité de Postulaciones Judiciales.
A la luz de su discurso, Gutiérrez fijó posición con respecto a la «legitimidad» que tendrían entonces los magistrados del TSJ. De acuerdo con la magistrada, el Derecho Constitucional internacional ha insistido en que «los valores superiores del derecho y del orden que la Constitución ha establecido como fundamentales, permanezcan protegidos, y esa fuerza se sitúa en el juez».
Vale destacar, estos razonamiento que adelantan posición de la presidenta de la Sala Constitucional, son un preámbulo a la eventual anulación del acto legislativo que designó a 13 magistrados titulares y 22 suplentes del máximo órgano judicial. Una comisión especial de la Asamblea Nacional adelanta una investigación sobre el cuestionado proceso de designación, ocurrido en diciembre pasado, y ha constatado la existencia de vicios de nulidad, por lo que esta semana podría presentar un informe ante la plenaria.
Maduro: «Tenemos grandes tareas»
Rompiendo el protocolo una vez más, el presidente de la República, Nicolás Maduro, pronunció un discurso dirigido a magistrados y jueces. Los invitó a dictar jurisprudencia «en función de los intereses nacionales».
En este marco, Maduro explicó lo que entiende por separación de poderes e independencia de la función judicial.
«Este debe ser un poder independiente, pero independiente de las influencias del imperialismo norteamericano y sus doctrinas que pretenden someter la justicia de nuestra patria. Independiente de los poderes económicos, de la república burguesa, de la corrupción, de las transnacionales. Debe ser un poder que dicte jurisprudencia en función de los intereses nacionales», dijo.
«Este día, que da inicio al Año Judicial oficialmente, es un día para plantearse y replantearse las grandes tareas que tenemos (…) Necesitamos una nueva fuerza de liderazgo en todas las instituciones. Unamos todos los poderes públicos que tenemos para que Venezuela salga adelante y supere todos los problemas», agregó.
Finalmente, el primer mandatario nacional agradeció a los jueces, porque el Poder Judicial «es el que ha permitido superar al país todo los retos que nos ha tocado y los que vengan de esta guerra en contra de Venezuela».