La sustitución de US$ 500 millones al año en importación y la generación de 4 mil empleos directos, permitirá la nueva fabrica de tuberías ranuradas, ubicada en la Faja Petrolifera del Orinoco, en el oriente del país.
Esta industria nació tras una alianza entre Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y el consorcio de pequeñas industrias (Petropymi), con participación de 21 empresas mixtas.
Petropymi contará con más de 80% de las acciones de la fábrica que permitirá satisfacer la demanda de tubos, anteriormente importados desde Colombia hacia Venezuela.
El ministro de Industrias y Comercio, Miguel Pérez Abad, considera que la iniciativa muestra de qué manera es posible fabricar productos con valor agregado, en lugar de comercializar únicamente materias primas.
De esta manera, el Ejecutivo comienza a dar paso a una economía más productiva y diversa.