Iluminación precaria, irregularidades en el servicio de agua, sobreprecio del pasaje en el transporte público e inseguridad son algunos de los problemas que enfrentan a diario los vecinos de la parroquia Tamaca, en el municipio Iribarren, de Barquisimeto.
Según vecinos del sector, “existen muchas irregularidades en los servicios públicos, el agua no llega por tubería, tenemos que comprarla a los camiones cisterna. Además, existe un grave problema con las tuberías de aguas negras, en la zona se encuentran muchas que están rotas, dejando salir las aguas y los malos olores”.
Además del mal funcionamiento del servicio de agua potable, los vecinos de Tamaca, denuncian que el sector se ha convertido en una zona roja, por la inseguridad que reina en las calles de la parroquia, del norte de Barquisimeto, atribuyen parte del problema de inseguridad a la escasa iluminación publica.
Para María Durán, “hay tantas necesidades en Tamaca, que parece que los gobernantes se olvidaron de nosotros después de recibir nuestros votos, tanto el alcalde como el gobernador, hacen caso omiso a las necesidades que se han planteado por todos los medios”.
Al igual que diversos sectores del estado Lara, la parroquia Tamaca no escapa de la especulación en el incremento del pasaje en el transporte público, pues los vecinos denuncian que “los transportistas hacen como quieren y colocan el precio que mejor les resulte, aun cuando el costo del mismo, fue establecido por las autoridades del transporte público”.
Aseguran que de Bsf. 25, tarifa establecida por el AMTT, los choferes de las líneas de transporte cobran hasta Bsf. 120 y los fines de semana las tarifas son más elevadas, la misma situación ocurre con los transportes de la Misión Transporte, que cobran incluso, pasajes más costosos, que las demás líneas de transporte.
El sector educativo en Tamaca no escapa de los problemas, pues en el Grupo Escolar Tamaca, que recibe a diario alrededor de 312 niños, entre los turnos de mañana y tarde, esperan solución al problema de inseguridad, agua, zonas de esparcimiento para los niños y especialmente el caso de cuatro docentes, quienes tienen entre 4 y 8 años de antigüedad y no han recibido contratación por parte de la Zona Educativa, por consiguiente no reciben salario por las horas trabajadas.