A 24 años del intento de golpe de estado del 4 de febrero 1992 (4F) que la dignidad de unas Fuerzas Armadas sofocó a dicha acción liderada por 5 comandantes del Ejército: Hugo Chávez Frías, Francisco Arias Cárdenas (FAC), Jesús Ortiz Contreras (JOC), Yoel Acosta Chirinos (YACH) y Jesús Urdaneta Hernández (JUH). El régimen que nos desgobierna la celebra como fecha patria, no obstante endosar calificativo golpista a sectores de Oposición.
Una asonada que aspiraciones sociales de la población reivindicaron y en confianza al comandante líder y seguidores golpistas recibieron beneficio de amnistía, fue democráticamente electo para ejercer Presidencia de la República. Pero la carencia de una formación gerencial para la conducción administrativa frustró esas esperanzas.
A 17 años de instauración del régimen orientado por dictadura castro comunista implantó un “socialismo del siglo XX” que ha convertido a Venezuela en el país más corrupto del mundo, empañado por narcotráfico de drogas. Según politólogo Nicmer Evans “desde 1999 sólo en fuga de capitales y descuadre de Pdvsa, $475 mil millones han desaparecido”.
Mundialmente también creó récord en inflación que ha provocado una crisis jamás padecida, con escasez de productos básicos, incluida la medicina. Para colmo en ese universo es considerado el país más inseguro; así nos mantiene en casa por cárcel, con los riesgos de las prisiones, desde donde los pranes de esas prisiones coordinan nuestros movimientos.
De esos comandantes insurgentes en prisión, el hoy difunto idolatrado solo mantenía buenas relaciones con JUH, con quién rompió cuando ya encumbrado en el Poder le presentó lista de corruptos. Los otros estaban al lado de FAC, que le disputaba el liderazgo. JOC y YACH, participaron en Programa Alimentario Materno Infantil, del segundo Gobierno de Rafael Caldera, quien decretó el sobreseimiento de todos los golpistas. JOC murió en accidente de tránsito, cuando cumplía misión de ese cargo.
Hubo acercamiento en inicio del Gobierno electoralmente conquistado en 1998, pero marcaron distancia con un documento crítico suscrito en Coro. FAC quiso disputarle el Poder electoralmente y hasta llegó a participar en la subversión del 2002. Hoy, desde la Gobernación del Zulia en la cual fue impuesto por el partido oficial, está sumiso a Nicolás Maduro.
JUH ha sido consecuente en su distanciamiento. Se estableció en Guárico en donde llegó a postularse como candidato a Gobernador.
Esos comandantes beneficiados con la amnistía que comenzó con el gobierno constitucional de Carlos Andrés Pérez, fueron acusados de proyectar el magnicidio que inicialmente lo había acordado el parlamento en cuya forma unánime se había sumado el ahora Vicepresidente Ejecutivo. Con la amnistía siguió Ramón J. Velásquez y la terminó Rafael Caldera. Ese 4F se contaron 300 muertes solo en Caracas.
Hoy el legatario paisano, siguiendo la línea del teniente golpista amnistiado Diosdado Cabello, se opone a la medida.
Con todo y la crueldad del 4F quienes cifraron esperanza en sus protagonistas, jamás pensaron en bestialidades con presos que le anteponen un vocablo que no usaron con golpistas: “denominados”, como militarmente lo hacen en cárcel Ramo Verde. Allí el director Coronel José Viloria, que para el cara dura José Vicente Rangel es ejemplar padre de familia, se jacta de obligar a desnudar completo y a abrir piernas a madre y a cónyuge de Leopoldo López, en presencia de sus menores hijos. Ahora quienes pitan a esposa e hija de Cabello son torturados y amenazados de muerte.
Al MARGEN: Bueno sería saber quiénes y por qué dos diputados y sus respectivos suplentes de la MUD, dejaron de asistir a la sesión que debatió decreto de emergencia.
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