El Instituto Prensa y Sociedad (IPYS) capitulo Venezuela, presentó este lunes en la ciudad de Caracas, su más reciente estudio en el cual se aborda la censura y autocensura en nuestro país en el año 2015.
Marianela Balbi, directora de la referida institución, explicó que los datos fueron recabados mediante una encuesta aplicada a un universo de 227 periodistas que ejercen funciones en medios públicos, privados, comunitarios y oficiales.
«El principal indicador que arrojó este estudio es que el 37% de los participantes, refirió que una de las razones por las que se han mantenido o han preferido ser más cautos y guardar silencio, han sido por ejemplo las amenazas con acciones legales», precisó.
En este sentido, recordó que desde hace varios años, distintas organizaciones que defienden la libertad de expresión en nuestro país, vienen denunciando el uso del aparato judicial para criminalizar la actividad y el ejercicio del periodismo libre en Venezuela.
«Los periodistas temen con las amenazas de acciones legales que los podrían llevar a enfrentar un proceso civil o penal ante las instituciones estatales. Por ejemplo un 30% dijo que esa realidad obedecía a los distintos procesos judiciales ejercidos contra medios y periodistas en nuestro país, los cuales ascienden a 54 hasta la fecha», detalló.
Comenta que el 26% de los consultados, se autocensuran para resguardar una fuente de información y acota que un número similar, reconoce una opacidad para evitar «perjudicar a una persona inocente».
«En Venezuela ahora se ha instaurado una presión contra las fuentes de información. En años anteriores pudimos constatar que las presiones iban únicamente contra el periodista, pero ahora la situación cambió», reveló Balbi.
Asimismo informa que un 19% de los periodistas reconoce autocensura, para no perjudicar al medio en el cual trabaja, ya que podrían quedarse sin el sustento diario.
«Aunque una de las principales causas de la autocensura son las amenazas contra la seguridad y la integridad física, para este año 2015 este índice disminuyó con relación a otros años, a pesar de que sigue siendo por supuesto una de las causales más importantes en el momento de inhibirse para publicar una información; los periodistas tienen más temor a las acciones contra los medios a través del uso de la publicidad, o a través del uso discrecional de algunos mecanismos que perjudiquen a su entidad de trabajo», dijo.
Áreas sensibles
Precisó que las fuentes de información más sensibles para los periodistas y para los que dirigen informativamente los medios son por ejemplo: «los hechos de violencia y la criminalidad, conflictos con autoridades del gobierno, disputas con manifestantes violentos, escasez de alimentos y actividades relacionados con el narcotráfico. Estas básicamente son las áreas en las cuales los periodistas deciden aplicar la autocensura».
La directora del IPYS asegura que en Venezuela de manera lamentable, se viene incrementando la autocensura en los periodistas y con este estudio notan que este mecanismo «se está volviendo natural, para sortear los miedos y las posibles represalias que representa ejercer el derecho a la información».
«En primer lugar la censura empieza a tejerse por las constantes negativas de los diversos sectores a informar sobre un asunto. En segundo lugar se agudizan las presiones, que primero son sutiles e indirectas y luego mucho más directa y que derivan en la opacidad informativa y finalmente tenemos un tercer elemento que es la decisión voluntaria del periodista de guardar silencio. Para nosotros este tema de la autocensura es muy delicado y por eso debemos denunciar todos estos mecanismos de hostigamiento, bien sea contra los medios o contra los periodistas, ya que se han impuesto y por eso estamos hoy en una situación muy particular», finalizó.