La erradicación de la pobreza en Latinoamérica y el Caribe y la supervisión del fin del conflicto armado en Colombia centrarán el miércoles en Quito la cumbre de la Celac, el foro que agrupa a todos los países americanos menos Estados Unidos y Canadá.
El gran ausente en la IV cita de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) será el presidente de Argentina, Mauricio Macri, un liberal de derecha muy crítico del gobierno de Venezuela, promotor de este foro instituido en 2011 a instancias del fallecido líder venezolano Hugo Chávez.
En el encuentro regional, al cual Macri no irá por razones médicas, el presidente anfitrión, Rafael Correa, entregará la presidencia pro tempore de la Celac a su homólogo de República Dominicana, Danilo Medina, ante una veintena de mandatarios que ya confirmaron su asistencia.
Además de evaluar el sombrío panorama económico en la región, uno de los temas a tratar en la cumbre será la creación de una misión de Naciones Unidas (ONU) y representantes de la Celac, que verificará la inminente dejación de armas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en negociaciones de paz con el gobierno colombiano desde hace más de tres años.
El análisis de este tema se hará a pedido de Colombia, informó el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, quien el martes presidirá la reunión de cancilleres previa a la cumbre.
Ambas partes «han planteado la importancia de que las Naciones Unidas puedan hacer una observación respecto a la decisión del gobierno de Colombia y de las FARC de hacer un cese bilateral de fuego y le han pedido a la ONU que con el apoyo de la Celac puedan hacer esa verificación. Eso va a ser considerado allí», dijo Patiño a periodistas el viernes.
El gobierno de Juan Manuel Santos y las FARC elevaron un pedido al Consejo de Seguridad de la ONU para que defina los detalles la misión.
Jeffrey Feltman, secretario general adjunto de Asuntos Políticos de la ONU, participará en la cumbre para discutir el papel de la Celac en ese cometido.