Se espera un planteamiento detallado de la medida. Uno de los planes que mayor fuerza cobra en el escenario económico venezolano actual, tras las modificaciones del gabinete ministerial y el Decreto de Emergencia Económica Nacional, es el aumento en los precios de la gasolina. Sin embargo, la pregunta que se formulan muchos venezolanos es: qué se hará con ese dinero.
Algunos especialistas han comentado que dicho monto debe ir directamente a Pdvsa que asume los costos de producción. No obstante, el pasado año, representantes del gobierno comentaron que estos podrían ser destinados a un fondo de la Gran Misión Vivienda.
Al respecto, Rafael Quiroz Serrano, economista especialista en petróleo y docente de la Universidad Central de Venezuela (UCV), indicó que de ocurrir un aumento de la gasolina y de concretarse este de manera gradual y por sectores, con una intensa campaña de concientización, el mismo debe ser acompañado de información concreta del uso que se hará de los recursos allí obtenidos.
Comentó que el país requiere inversión en múltiples sectores y no sólo vivienda. Entre estos educación, salud, infraestructura y otros. Sin embargo, para el diseño de un plan que aborde el uso que se hará de este dinero, cree conveniente la creación de una comisión integrada por gobierno y parlamentarios, a fin de supervisar este. La misma debería dar conocer el resultado de esos gastos.
Considera que así se obtendrá el apoyo de la población durante la transición. Sin embargo, esta labor depende principalmente de la voluntad del gobierno.
Un subsidio sin sentido
Refirió que la problemática no son los niveles de producción sino los precios, los cuales no se equiparan con los costos, tal y como ya se conoce. En la actualidad se consumen cerca de 550.000 barriles diarios, sumado a otros combustibles y grasas.
-Los costos son muy superiores al precio de venta, una brecha inmensa que le representa a la nación una pérdida que sobrepasa los 12.000 millones de dólares anuales, un subsidio que el Estado venezolano otorga al mercado interno y que también genera fuertes daños en la economía.
Destacó que si se calcula la pérdida con base en los costos de oportunidad, el país dejaría de percibir entre $24.000 y $26.000 millones.
Según Quiroz Serrano ese “sangramiento” se ha vuelto insostenible por su falta de racionalidad, por lo que es momento de aumentar el precio del combustible.
Recordó además que se trata de un subsidio regresivo, cuyos mayores beneficiados son las clases media y alta y no la baja, propiciando un derroche de gasolina, por falta de conciencia y mal uso de la misma.
A pesar de que el fallecido presidente, Hugo Chávez, hizo mención de un posible aumento de gasolina y el actual presidente, Nicolás Maduro, se ha expresado en cuatro oportunidades sobre el mismo, este aún no ha sido concretado.