Tomar lápiz y papel para anotar ideas de nuevos e interesantes proyectos, es una buena manera de comenzar el año. Todos tenemos la capacidad de pensar, inventar, crear y en definitiva, innovar, es por eso que para esta primera edición del 2016, queremos compartir con ustedes algunas recomendaciones interesantes para convertirse en personas altamente productivas, dispuestas a asumir retos y preparadas para comerse el mundo haciendo realidad sus sueños y alcanzando el éxito
En una noche de desvelo, Antonio decide continuar la idea que desde hace algunos meses tiene en mente, se dispone a preparar café y su libreta de notas esta lista para concluir aquello que lo ha tenido pensativo. Luego de haber leído varios libros, conocer experiencias de grandes emprendedores y consciente de sus habilidades y destrezas, el proyecto del joven comienza a plasmarse para luego hacerse realidad… ¡Eureka!. Este creativo e interesante proceso en el cual concebimos algo nuevo, lleno de valor y que pretende atender un requerimiento en la sociedad se conoce como innovación.
Los venezolanos por naturaleza somos emprendedores, sin embargo, en algunas ocasiones, nuestras ganas de “echarle pichón” a lo que significa un nuevo reto queda de lado frente a contratiempos, situaciones o simplemente excusas que no permiten ver más allá de lo que somos capaces de hacer para innovar.
En este sentido, una de las cosas que debemos entender e internalizar es el cambio, que lejos de desanimarnos, nos regala una oportunidad para salvar el mundo como cualquier superhéroe, asumiendo riesgos y buscando oportunidades.
Ahora, ¿por dónde comenzar a innovar?, la respuesta es sencilla y está en nuestras manos. Jeff Dyer, Hal Gregersen y Clayton Christense, especialistas en liderazgo y administración de empresas, hablan de los “catalizadores creativos” para referirse a personas que tienen la capacidad de descubrir ideas, reunirlas y experimentarlas, sin miedo al ensayo y error. Por ende, necesitamos convertirnos en catalizadores, trabajando con la mejor de las disposiciones y creyendo en aquel refrán que dice “si lo sueñas, haz que pase”.
Una de las claves es asociar
Los expertos también señalan que una de las claves para convertirse en un innovador es desarrollar habilidades asociativas, entendiendo la asociación como una destreza relacionada con el aprendizaje y la experiencia que permite sintetizar y comprender nuevos aportes para convertirlos en oportunidades.
Para ello, es recomendable entre otras cosas: Adoptar diferentes roles- que nos permitan pensar como niño, ama de casa, joven, empresario, entre otros-para ampliar la visión y comprender intereses; crear metáforas para determinar características o ventajas de productos o servicios y hasta construir una caja de curiosidades que será llenada progresivamente con materiales u objetos que, aunque disparatados, pueden representar el comienzo de una creativa e interesante idea utilizando la asociación.
Sin embargo, un aspecto a tomar en cuenta es evitar la desesperación y el estrés, todo fluye si estamos focalizados en lo que verdaderamente queremos, quizás llenar la libreta con tantas anotaciones representa un compromiso que no es factible del todo, razón por la cual es conveniente hacer una limpieza de lo escrito, sincerarnos y aclarar el panorama.
Recuerda además que lo más importante es hacer lo que nos apasiona y mantiene felices, pensando en positivo y dándonos la oportunidad de abrir nuevos caminos, tener ilusiones, conocer gente optimista, ingeniar cosas distintas y sonreírle a la vida siempre agradecidos…¡feliz año lectores!
Un innovador
Debe cuestionar:
Con el objeto de encontrar mejoras y oportunidades. Preguntar e indagar deben ser sus mejores aliados.
Debe observar:
El mundo que lo rodea y todo lo que en él participa. Debe ser detallista, minucioso y muy crítico.
Debe crear redes de contactos:
Con personas afines a sus intereses y gustos para hacer alianzas o sumar esfuerzos. También conocer individuos cuyos entornos y puntos de vista difieran radicalmente.
Debe experimentar:
Con nuevas ideas que le permitan explorar el mundo y conocer, sin miedo al fracaso y ganado al éxito.
Debe ser una persona creativa:
Consciente de sus habilidades y destrezas, que le permitirán impregnar sus proyecto de cosas nuevas, diferentes y positivas.