El 23 de enero por si solo habla de una fecha histórica, para nadie es ni debe ser un secreto que en esta fecha se recuerda el derrocamiento de la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez, pero a razón de historia no es esta la que nos atañe hoy, sino una más cercana, la del barrio que lleva este nombre.
Según el cronista de la ciudad Edilio Lopez, la historia de este sector del este de la ciudad, data de los años 1755, cuando hubo el desligue de los ejidos de Barquisimeto, para aquel entonces el sitio se llamaría “Hacienda las Damas” que pertenecía a Enrique Fuentes, por dicha hacienda pasaba el camino que comunicaba Cabudare y Barquisimeto, además llevaba a Tierritas Blancas, lugar donde Bolívar llevo a cabo una de sus batallas.
Para los años de 1700 ya Barquisimeto se encontraba en expansión desde Zamuro Vano, adelantando un poco la historia para acercarnos a la realidad del sector, es en 1958 cuando se hace el parcelamiento que llevaría por nombre Catedral, construido por Belutini y Bergamini, quienes decían que los terrenos eran propios pero terminaron perdiendo la pelea con el concejo y los terrenos pasarían a ser del municipio.
No es sino hasta 1982 que Oficina Municipal de Planificación Urbana OMPU, le concede el ámbito geográfico al barrio 23 de enero y aunque no se tiene fecha exacta de cuando comenzó a llamarse por este nombre, lo cierto es que el barrio sigue estando vigente y con una cantidad de problemas que lo vecinos que allí habitan, consideran como lamentables.
Inseguridad, aguas negras por las calles, huecos en las vías, irregularidad en el aseo urbano y olvido por parte de las autoridades competentes, son solo algunas de las quejas que tienen los vecinos del 23 de enero.
María Cuicas: En estos momentos lo que más nos preocupa son las colas, en las que tenemos que estar a veces desde muy temprano para conseguir la comida y los productos de primera necesidad y es mucho el tiempo que se pierde aquí, y en los lugares donde venden estos productos, llegan personas de otras zonas que no son cercanas a la comunidad y a los vecinos que nos corresponde comprar, en ocasiones nos quedamos sin nada.
Miguel López: Inseguridad, agua, alimentación, estamos pasando mucha necesidad, y el servicio de saludad que tenemos mas cerca, ni siquiera se sabe cómo está, no sabemos si esta abastecido, si tuviésemos la posibilidad de pedirle a las autoridades algo para nuestra comunidad, seria que se aboquen a la seguridad.
Ana de Leal: Son demasiadas las necesidades que padecemos en el 23 de Enero, el sistema de aguas negras es preocupantes porque siempre se están desbordando y nos gustarias que a las autoridades que le compete se aboquen y arreglen todas las tuberías.
Gladis Páez: Sería bueno que el Gobierno envíe seguridad a los puntos donde los vecinos del 23 de Enero, Cruz Blanca y Nueva Segovia hacemos las colas para comprar los productos de primera necesidad, porque a veces uno piensa muy bien si salir a comprar o no, el aseo urbano tampoco funciona bien, pues los días que tiene anunciado pasar no llega, por eso las calles están llenas de basura.
Elena de Brito: Lo urgente en definitiva es la inseguridad, pero las autoridades deberían organizar mejor, incluso las colas porque aquí viene gente a llevarse los alimentos que llegan. Yo le pediría a las autoridades que se aboquen a dar solución a los múltiples problemas que nos afectan y que no son de ahora, porque esto de las colas por alimentos y productos de primera necesidad es relativamente nuevo, pero el agua, el aseo urbano y los malandros si tienen años.
Antonio Pérez: En este sector el gran problema es que la gente no participa y cuando alguno decide hacerlo asistiendo ante las autoridades, se les quitan las ganas porque no encuentran respuestas, aquí tenemos una cancha que bien podría servir para que nuestros niños y jóvenes hagan deportes y no caigan en la mala vida, pero eso está lleno de monte y ni los vecinos, ni las autoridades hacen algo por rescatarla, creo que todos deberíamos poner nuestro granito de arena para que hagamos más vivible nuestro sector.
Amado Paredes: La alcaldía y la gobernación, deberían meter el ojo y supervisar los servicios que dependan de ellos y que por lo menos no garanticen seguridad que es el punto más delicado que tiene el barrio y también si el ciudadano alcalde implementara un sistema para supervisar la llegada de alimentos y medicinas, que cada quien se aboque a lo que le corresponde hacer, no es hora de buscar culpables, es mejor dedicarse a trabajar y resolver todos los problemas, busquemos soluciones y verán como mejoran las cosas. En 45 años que llevo viviendo aquí el 23 de Enero esta 75 por ciento igual, no se ven mejoras por ningún lado.
