La mañana de ayer cuando les iban hacer el pase de comida a los privados de libertad que se encuentran en la comisaría de Polilara en Quíbor, municipio Jiménez, se alzaron, amenazando a los funcionarios. De la misma forma se corrió el rumor de una posible fuga por lo que los uniformados decidieron adelantarse.
Los 36 reos que allí se encuentran fueron sometidos a una requisa sorpresiva por parte de Polilara, quienes los sacaron de los dos calabozos y procedieron hacer una revisión exhaustiva.
Localizaron dentro de los calabozos la cantidad de ocho chuzos, armas blancas que habían sido creadas por los mismos internos, que podrían usarse para auto flagelarse, o causarle daño a un compañero.
Trascendió que esos 36 privados de libertad están distribuidos en dos calabozos con unas medidas de cuatro metros de largo por cuatro de ancho, quienes tienen que turnarse para dormir en el piso, en hamacas, sentados, están cansados de dicha situación y su principal petición es el traslado a un recinto carcelario.
Como medida de castigo el día de ayer le suspendieron la visita a los internos.