La tarde de ayer se tiñó de luto para la familia Narváez, al enterarse del fallecimiento de dos de los once hermanos.
Gustavo Andrés Narváez de 37 año de edad y Deivis José Narváez de 35 años, según versión de familiares y compañeros, murieron por la inhalación de gases tóxicos mientras construían un pozo séptico en el parcelamiento La Floresta, del caserío El Placer en Cabudare.
Álvaro Luis Narváez de 32 años de edad y hermano de las víctimas se encuentra recluido en El Hospital Central Antonio María Pineda, por haber inhalado también gases tóxicos que emanaban en la construcción.
Según la versión de los compañeros de las víctimas, el suceso ocurrió a las dos y treinta minutos de la tarde, cuando se encontraban trabajando en la fase final de un pozo séptico que construían, el cual había alcanzado 8 metros de profundidad y tenían previsto culminar el día de hoy.
El menor de los hermanos (Álvaro Luis Narváez) entró para seguir la labor, cuando uno de su compañeros lo vio actuar y comportarse de forma extraña y le notificó al hermano, Gustavo Narváez quien bajó para socorrerlo pero al inhalar los gases también presentó un estado de shock.
Ante la situación de emergencia, Deivis Narváez, también hermano de los anteriores, acudió para ayudar lo cual produjo que también inhaló los gases, lo que dejó como resultado fatal el fallecimiento de los dos últimos que había bajado. Al percatarse de la situación de los hermanos Narváez, sus compañeros llamaron a los bomberos para que socorrieran a las víctimas pero no contaban con que los efectivos del cuerpo de rescate del municipio Palavecino llegarían un hora más tarde, en un carro particular y sin el equipo necesario para salvarle la vidas a las dos víctimas fatales.
Pasada una hora y media del suceso, acudieron al lugar efectivos del cuerpo de bomberos de Barquisimeto, quienes sí contaban con el equipo de rescate necesario para ayudar a las víctimas, pero demasiado tarde.
“Si los Bomberos de Cabudare hubiesen llegado antes y con el equipo necesario, nuestros amigos seguirían con vida”, aseguraron compañeros de labores de los fallecidos quienes describían a los hermanos como hombres trabajadores, amigos, echadores de broma, también comentaban que horas antes conversaban de los planes que harían al terminar el trabajo.
Según el testimonio de vecinos del municipio Palavecino, el cuerpo de bomberos que sirve a la localidad lleva varios meses sin implementos para realizar salvamentos, como el caso de los hermanos Narváez.
“Tenemos toda la vida trabajando en esto de construir pozos sépticos y nunca había pasado algo similar, estamos muy triste y conmovidos por lo que pasó hoy con mis hermanos” aseguró José Luis Narváez, hermano mayor de las víctimas.
Familiares y amigos se mostraron conmovidos por el hecho que enlutó ayer a la familia Narváez, los mismos se encontraban en las inmediaciones del ambulatorio de Cabudare Don Felipe Ponte, donde se encontraba el cuerpo sin vida de Gustavo Narváez.
Gustavo Andrés Narváez de 37 años de edad y su hermano Deivis Narváez de 35 años, quienes junto a algunos de sus hermanos y compañeros, trabajabana en la construcción de pozos sépticos, residían en el sector El Mayal de la parroquia José Gregorio Bastidas, del municipio Palavecino y ambos dejan 2 niños en edades de 11 y 8 años.
