Este viernes será día de júbilo en Quíbor y todo el municipio Jiménez gracias a la tradicional procesión que cada 22 de enero se realiza entre su hogar en la iglesia de La Ermita hasta la de Nuestra Señora de Altagracia con el histórico lienzo milagroso con su imagen.
Se trata de la visita número 134 sobre la cual, este martes se ofreció una conferencia de prensa para aportar detalles sobre ese acontecimiento religioso.
Estuvieron presentes, el secretario general de gobierno, Erick Valles, el cura párroco, Havis Escalona, el director de seguridad y orden público de la gobernación, Edilberto León, la directora de Cortulara, Rosángela Pereira, Alfredo Mora, en representación de la alcaldía de
Jiménez y otros funcionarios y particulares relacionados con la actividad.
Valles se refirió al plan operativo que se pondrá en marcha a partir de mañana jueves con el Plan de Atención Social en la plaza de La Ermita, una retreta en la glorieta de la plaza Bolívar y la colocación de los puntos de hidratación que funcionarán el día de la procesión.
Destacó la importancia que desde la gobernación se le está dando a todas las tradiciones larenses, entre las que no podían faltar las religiosas.
Mora, por su parte, dijo que las actividades comenzaron el sábado con la bajada del lienzo hasta el trono en el que la trasladarán hasta la iglesia Nuestra Señora de Altagracia.
Expresó su confianza en que se mantenga el sentimiento de oración durante el recorrido y la permanencia de la imagen en el centro de la ciudad.
Informó que el viernes, a las seis y media de la mañana, se realizará una caminata desde la plaza Yacambú hasta la Pepe Coloma, en la que esperan una nutrida participación.
El director de seguridad y orden público se refirió a las previsiones a tomar e informó que ese jueves estarán en acción 288 funcionarios de Polilara, Protección Civil y Emergencias Lara, con su respectiva ambulancia y camión de rescate para garantizar la normalidad durante el recorrido por la avenida Pedro León Torres.
Renovación espiritual
Para el padre Havis Escalona, este viernes la pocesión será especial por estar enmarcada en el año de la misericordia en el que todos debemos descubrirnos como hermanos y no como adversarios.
“Tenemos la oportunidad de una renovación espiritual de nuestras vidas pues se trata de una gran experiencia de fé con mucha connotación religiosa”, afirmó.
Enfatizó en el llamado a los feligreses a participar con mucha devoción pues, “es un día en el que los quiboreños nos regalamos para la espiritualidad, un día de muchas bendiciones, para sentir el amor de la madre de Dios”, afrirmó
Informó que en la misa que se celebrará el viernes a las cuatro y media, previo a la partida del recorrido, oficiará el arzobispo de Barquisimeto, monseñor Antonio López Castillo.
El lienzo con la imagen de la Virgen de Altagracia retornará a La Ermita el sábado 5 de marzo.
La leyenda
La historia reseña la aparición del lienzo como un milagro pues le apareció a un quiboreño que, a petición de sus hijas, había hecho varios viajes en su búsqueda, hasta encontrarla sobre una mesa en una posada donde se albergaba.
Igualmente se cuenta que un agricultor que estaba a punto de ahogarse en un río, dirigiéndose al cielo pidió fuese salvado, pero como no se acordó en ese momento de ningún santo invocó a una “virgen de la caimana”, recibiendo desde entonces ese popular calificastivo.
Águedo Felipe Alvarado, artífice de la procesión
La primera procesión con el lienzo de la Virgen de Altagracia desde el templo de La Ermita se llevó a cabo en enero de 1882, a petición de monseñor Águedo Felipe Alvarado, entonces cura párroco de la iglesia principal del municipio Jiménez.
El clérigo había logrado la reconstrucción del templo parroquial y al concluir los trabajos, en diciembre de 1881, pidió que ,para darle mayor realce a la reinauguración, al siguiente año, se hiciera con el lienzo milagroso.
Eso ocurrió el 23 de enero con una misa especial presidida por monseñor José Diez, entonces obispo de Barquisimeto.
Es de destacar que el templo de Nuestra Señora de Altagracia, en Quíbor, es Patrimonio Nacional, además de un orgullo para los quiboreños.
Para este 22 de enero, la patrona del municipio la encuentra completamente remozada, con el ambiente propicio para recibir a los miles de devotos de “la caimana” que, sin duda alguna, la colmarán a diario para recibir sus bendiciones.