El slugger Álex Cabrera se alzó con el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, tras convertirse en el referente ofensivo de los escualos y cumplir otra soberbia temporada con el madero.
El nativo de Caripito logró su tercer premio de este tipo en el circuito rentado nacional, al totalizar 137 puntos, producto de 19 papeletas para el primer lugar.
Cabrera superó a los cubanos Félix Pérez, de Leones del Caracas, y Rangel Ravelo, de Cardenales de Lara, que terminaron en la segunda y tercera posición con 126 y 109 puntos de forma respectiva.
También fueron considerados en la votación José Osuna (Bravos de Atlanta), Hassan Pena (Navegantes del Magallanes), Adonis García (Magallanes), Álex Romero (Águilas del Zulia), Eliézer Alfonzo (Bravos), José Castillo (Caribes de Anzoátegui), José Martínez (Tiburones de La Guaira) y Ronnier Mustelier (Tiburones).
“Me siento súper feliz. Creo que a los 44 años de edad, ganarse un MVP no es nada fácil”, declaró Cabrera al departamento de prensa de la LVBP.
“Pienso que se debe a la constancia, la disciplina y el trabajo. Eso es lo que te ayuda a ganar premios. Es lo que he hecho por tantos años: trabajar y trabajar. Soy disciplinado y organizado, por eso Dios me ha dado esa dicha”, agregó “El Samurai”.
Cabrera terminó como líder en cuadrangulares con 11 conexiones de vuelta entera y fue colíder en carreras impulsadas con 39.
“Creo que tuve unos números impresionantes”, enfatizó Cabrera, que antes había ganado el premio en las zafras 1997-1998, con Pastora de Los Llanos, y en la 2013-2014 con su actual uniforme.
“No me lo esperaba. Yo sabía que el anuncio era hoy (ayer), pero uno nunca sabe. Tantas cosas pasan en este béisbol, que uno nunca sabe. Pero tenía los números”, prosiguió el monaguense.
“Para ser MVP tienes que empujar carreras, dar jonrones y batear. Yo hice las tres cosas. Es una satisfacción muy grande”, enfatizó.
“Todo el mundo se quedó frío. “Yo mismo se los dije a mis compañeros después que me llamaron. Se los dije y quedaron impresionados. Me felicitaron. Somos un grupo muy unido, parecemos una familia. Así es este clubhouse, todos brincaron, se pararon, me felicitaron. Es bueno sentir ese apoyo. Es como ellos dicen, que soy un ejemplo para ellos y me siento muy contento de estar en esa posición”.
A sus 44 años, Cabrera considera que tiene mucho para dar. De hecho, tras ganar el prestigioso premio, el slugger aseguró que pretende mantenerse activo -al menos- por una temporada más.
“Tenía pensado que este fuera mi último año, pero todos me lo dicen, para qué me voy a retirar: ‘Mira la edad, los números que haces, si puedes seguir jugando y le sigues dando a la bola, sigue adelante’. Es verdad. Por eso jugaré un año más. Después, haga lo que haga, será el momento de descansar”, cerró.
