El costarricense Joseph Chavarría, del equipo Nestle Giant y merecedor de todo tipo de elogios por el buen desempeño que ha tenido en la presente edición de la Vuelta al Táchira, admitió que tiene la ilusión de cargar con el título de la competencia, pero está consciente de que la tarea es dura por el buen nivel que exhibe el líder José Mendoza y por el hecho de ser un extranjero.
Chavarría entra a la etapa de este sábado, penúltima del itinerario de carrera, ubicado en la tercera plaza del casillero general, a solo 24 segundos del dueño de la camiseta amarilla.
“La ilusión de ganar está ahí y lo vamos a intentar, pero hay un José Mendoza que realmente anda increíble, a mi parecer”, señaló el pedalista tico, quien con su desempeño ha roto la “costumbre” que han tenido los corredores extranjeros en los últimos tiempos de la ronda andina, cuando vienen a pasear y se marchan de suelo tachirense sin pena ni gloria.
Chavarría reconoció que para él la prueba andina es muy especial, tanto así que la monitorea desde hace mucho tiempo.
“Siempre le había hecho seguimiento, sabía muchas cosas de la carrera y solo me faltaba venir… es la primera vez que vengo a Venezuela y estoy muy contento con lo que he visto, tanto de la carrera como del público que la apoya”, adicionó el escalador de 23 años.
“Me gusta mucho de acá, que tiene muchas llegadas en alto, cosa que, por ejemplo, no hay en mi país… y para mí que soy escalador, esta carrera me favorece”, señaló.
Su buena condición física la atribuye al trabajo realizado previo al giro más importante de su país (diciembre), en la que marcó un destacado quinto lugar. “Antes de la Vuelta a Costa Rica me preparé bien y aproveché el ritmo que traía para andar bien aquí (en la Vuelta al Táchira)”, indicó.
Interrogado sobre su planteamiento para la determinante porción de este sábado, con el ascenso a Casa del Padre, señaló que lanzará ataques si se siente en condiciones, pero considera que es un trayecto en el que debe administrar fuerza para no incurrir en excesos que luego le pasen factura.
“La propia carrera me lo dirá (si ataca o no). Depende de las sensaciones, de las circunstancias, cómo vaya la carrera. Si la oportunidad se presenta, pues vamos a atacar, pero si vamos apretados (sin muchas fuerzas) tocará administrar”, cerró el destacado corredor, quien sorprendió sobre su conocimiento acerca de la prueba, al admitir que tiene conciencia de que desde hace más de diez años no gana un corredor extranjero con un equipo foráneo, desde que lo hizo el colombiano Hernán Darío Muñoz en 2003.
