Comenzó un nuevo año y muchos venezolanos andan por allí afanosos debido a los acontecimientos políticos que se están desarrollando en el país. Y eso no es bueno. Todo aquel que se dice cristiano debe recordar las Palabras de nuestro Dios: “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús”. Fil. 4:6,7. Y eso, realmente pudimos experimentarlo.
Recordemos, que diariamente escribimos nuestra propia autobiografía, creando un legado para bien o para mal en aquellos que nos siguen. La historia de la vida del hombre está permanentemente en desarrollo. Los demás, constantemente nos están “leyendo”. Entonces pregunto: ¿Qué tipo de legado estamos construyendo? La acumulación de nuestras palabras y acciones hacen un camino para otras personas. Aún, las elecciones más cotidianas podrían determinar lo que le pasará a aquellos que amamos.
Siempre he dicho y lo seguiré diciendo en mis escritos: ¡Alabo a Dios por cada año que cumple el Decano de la Prensa Nacional, el diario EL IMPULSO, por cuanto ha sido un baluarte de la pluralidad ideológica, política y religiosa en este país. Nos gozamos en constatar a través de la historia lo que estamos diciendo y más aún en estos tiempos, que por la correlación de fuerzas políticas que se dieron en nuestro país, propicias para asumir posiciones radicales y de exclusión, EL IMPULSO mantuvo su pluralidad, dando oportunidad de exponer en esta ilustre página de opinión diversidad de planteamientos para edificación de nuestros lectores.
Les cuento. Hace tiempo, dictando una conferencia frente a un numeroso público cristiano, comencé preguntando si alguno podía decirme quiénes eran Samúa, Safat, Igal, Palti Gadiel, Gadi, Amiel, Setur, Nahbi, Seuel; pero nadie, a pesar de la presencia de preclaros y estudiosos dirigentes, pudo dar una respuesta. Luego pregunté, si alguien conocía a Josué y Caleb; y sobraron las manos levantadas.
Resulta que estos personajes estaban todos juntos cuando Dios les escogió para que realizaran un trabajo en su favor. Eran los doce espías comisionados para explorar la tierra de Canaán. Pero los 10 primeros escribieron su autobiografía de manera vergonzosa. Fueron cobardes, flojos y faltos de fe. Obviaron que tenían un Dios Todopoderoso. Dijeron: “La tierra por donde pasamos para reconocerla, es tierra que traga a sus moradores…” Jos 13:32. Por lo contrario, Josué y Caleb decidieron dejar un legado poderoso que hoy nos ayuda: “Entonces Caleb hizo callar al pueblo y dijo: Subamos y tomemos posesión de ella; porque más podremos nosotros que ellos”. Vers.30. Hoy y para siempre, los 10 cobardes desaparecen en la historia, mientras el legado de Caleb y Josué sigue vigente.
EL diario EL IMPULSO tiene 112 años escribiendo su autobiografía y ha dejado un legado incuestionable para la edificación de generaciones y hoy, lo certificamos, es también instrumento divino para Salvación. Nos gozamos en ser parte de ese legado. ¡Dios bendiga a EL IMPULSO! ¡Hasta el próximo martes Dios mediante.
