La recién designada ministra de Salud, Luisana Melo, desestimó dar prioridad a la escasez de medicinas, al déficit hospitalario y las deficiencias en el sistema público de atención sanitaria, ya que, en su opinión, eso «no es lo importante».
Recalcó que «hoy el pueblo venezolano entiende que no sólo puede ser la lista de quejas, sino como logramos organizarnos para la defensa del proceso revolucionario».
Se enfocará en un «debate político-conceptual» con las comunidades, de las bases de un sistema integral de salud comunitaria en defensa de la revolución.
«Lo más importante es que estamos el poder constituido con el poder constituyente sentados en un mismo espacio de debate no sólo para el tema de la contraloría social sino también para lograr la defensa de la revolución en esta nueva etapa del proceso, pero en segundo lugar lograr que las comunidades y el Estado se acerquen y se planifique, diseñe y ejecute de forma de forma conjunta todas las políticas de salud.
Es la única forma de lograr la transformación de este Estado a un Estado realmente popular (…) Los debates que venimos haciendo no sólo son la típica solicitud de un listado de peticiones de lo que hay y lo que no hay», manifestó.
Las declaraciones fueron dadas en el marco de una asamblea comunitaria realizada este sábado en la zona industrial de San Martín, al oeste de Caracas.
Melo señaló la necesidad de entender la Salud «no sólo como un problema de establecimiento de atención médica, sino como un concepto integral que involucra la educación la vivienda, el agua la cultura y el deporte.
Estas áreas de salud integral comunitaria constituyen ese el germen y lo más importante a partir de este año es la nueva dimensión que se le da a este espacio».