Rafael Medina, pedalista quiboreño de 19 años, es la gran esperanza del equipo larense, Fundación Ángel Pulgar, para la edición 51 de la Vuelta al Táchira.
Tiene capacidad para afrontar los terrenos montañosos, razón por la cual genera ilusión dentro del cuerpo técnico de su escuadra, encabezado por Danis Yépez. Con él (Medina), la tropa crepuscular busca pelear la camiseta sub23 del evento y tratar de estar en lugares cimeros en las etapas de enorme exigencia, como Cerro El Cristo, La Grita y Casa del Padre.
“Mi primer objetivo es dejar en alto el nombre de Lara, después de tanto tiempo sin que viniera un equipo de allá a la Vuelta al Táchira”, señaló un sonriente Medina antes de la partida. “Me fijo en la camiseta sub23, pero también en la general absoluta, con deseos de estar allí con los grandes”, agregó.
Medina, un hallazgo de la dirigencia crepuscular, al sacarlo del ciclismo de montaña y llevarlo a la ruta, está por primera vez en la llamada Vuelta Gigante de América, por lo que conoce poco el recorrido de estas tierras. Sin embargo, ya tuvo la oportunidad de entrenarse en la subida a Casa del Padre y dijo que “las sensaciones fueron buenas”. “Esa etapa es muy bonita y es decisiva. Espero estar bien ese día para buscar un buen resultado”, cerró el quiboreño.
