El paludismo o malaria no representa una enfermedad de riesgo en el estado Lara, por cuanto los casos son propios de otros estados, señaló Carmen Torres, directora de Epidemiología en la región.
“No tenemos registros de casos propios. Vienen de estados como Anzoátegui y Bolívar las cuales son zonas que cuentan con el vector”, explicó Torres.
El mosquito Anopheles es el responsable de propagar la enfermedad en caso de estar infectado, sin embargo el contagio también se puede provocar de madre a hijo durante el embarazo o mediante transfusiones de sangre. Una vez que el vector pica, el mismo deja parásitos que se logran alojar en el hígado, que posteriormente infecta a los glóbulos rojos y puedo provocar anemia e incluso la muerte.
Sin embargo, Torres asegura que si bien el caso del estado Lara no es propenso de manera directa a la malaria, igual se toman previsiones, pues el país ha sufrido un incremento de tal enfermedad.
“Si algún médico llega a sospechar de que una persona esté contagiada de tal enfermedad se encarga inmediatamente de tomar una muestra de sangre, la cual es posteriormente examinada, pero verificar si se trata de paludismo y en caso de ser así reconocer de cuál tipo de malaria se trata para de esa manera lograr establecer el tratamiento correspondiente”, explicó la directora de Epidemiología.
Sobre la enfermedad
Son cuatro los tipos de paludismo existentes, uno de los cuales es potencialmente mortal, como lo es el plasmodium falciparum.
Los síntomas se pueden presentar en el contagiado hasta siete días después y en algunos países donde el paludismo es endémico, por lo cual puede ser asintomático.
El paludismo se caracteriza por provocar fiebre, escalofríos, dolor abdominal (hígado) y vómito, sin embargo luego de un tiempo se puede presentar anemia, paludismo cerebral y sufrimiento respiratorio.
En relación al tratamiento, depende del tipo de paludismo que se trate, pero lo más común es el uso de la artemisinina.
