Las vacaciones de fin de año de Kenny Gregorio Michelena Peña culminaron con su muerte.
A las dos y media de la madrugada del domingo, cuatro sujetos irrumpieron en la casa de su hermana, en la calle Juan Crisóstomo Falcón del sector Universitario de Punto Fijo, estado Falcón.
El hombre, de 39 años de edad, trabajaba como custodio penitenciario desde hace nueve años. Estuvo en la Ciudad Penitenciaria de Coro, en Mérida y los últimos meses en Barquisimeto, desde donde viajó a Punto Fijo el 30 de diciembre para recibir el 2016 con su familiar.
Fue sorprendido
El compartir y el disfrute por parte del joven continuaron el 2 de enero en el porche de la casa de su hermana. En el contar de anécdotas y disfrute transcurrió la noche hasta casi el amanecer con su cuñado y un sobrino político.
A las dos y media de la madrugada cuatro sujetos subieron por el techo de la quinta. Uno de ellos se lanzó arriba de un carro Toyota Corolla que allí estaba estacionado y comenzaron a disparar. Tres impactos de balas sufrió el hombre, mientras sus otros dos familiares pudieron correr y ocultarse dentro de la vivienda.
El silencio reinó por unos cinco minutos. Los familiares se asomaron por una de las ventanas de la vivienda para ver qué ocurría y observaron el cuerpo de Kenny Gregorio ensangrentado.
Fue inmediatamente llevado hasta la emergencia del Hospital Doctor Rafael Calles Sierra de Punto Fijo, pero ya estaba sin vida.
Kenny Gregorio Michelena Peña residía en la urbanización Las Velitas de la parroquia San Antonio de Coro. En cuanto a las causas del homicidio se desconocen, pues sus verdugos no se llevaron objetos de valor ni dinero en efectivo, pero por la forma en que fue ejecutado se presume que el móvil sea la venganza.