Mientras el director mexicano Alejandro González Iñárritu volvió a abrirse camino al Oscar con su épico western “The Revenant”, el 2015 vio nuevos filmes y realizadores latinoamericanos triunfar en la Berlinale y Cannes. El actor guatemalteco Oscar Isaac dio de qué hablar con su protagónico de “Star Wars” y el venezolano Edgar Ramírez estrenó el día de Navidad dos cintas de Hollywood.
El actor Edgar Ramírez estrenó el Día de Navidad no una sino dos películas prominentes: “Joy”, protagonizada por Jennifer Lawrence, Robert De Niro y Bradley Cooper; y “Point Break”, la nueva versión del clásico de 1991 de Kathryn Bigelow.
En la primera, una historia de la vida real dirigida por David O. Russell, Ramírez hace el papel de Tony, el esposo de una madre soltera (Joy) que se convierte en una empresaria exitosa al vender su primer producto en el canal QVC.
En la segunda, dirigida por Ericson Core, da vida a Bodhi, el líder de una pandilla amante de los deportes extremos que es infiltrada por un joven agente del FBI. Ambas estuvieron entre las películas más taquilleras del fin de semana: “Joy” ocupó el tercer lugar con una recaudación de 17,5 millones de dólares; “Point Break” el octavo, con 10,2 millones de dólares.
En 2016 Ramírez regresaría a la pantalla como el púgil panameño Roberto Durán en “Manos de piedra”, una película del venezolano Jonathan Jakubowicz en la que también actúan De Niro, Rubén Blades y Usher.
