En la puerta de la entrada principal del Hospital Br. Rafael Rangel en Yaritagua, estaban dos trabajadoras del centro de salud, quienes tenían una lista escrita a lápiz de grafito, que poco a poco se iba extendiendo, a la par de las lágrimas de dolor de quienes por desgracia asentían con la cabeza para confirmar el fallecimiento de su ser querido.
Decenas de personas tuvieron el penoso deber de identificar a once, que ayer al mediodía perdieron la vida en un lugar que irónicamente se llama el Puente de La Felicidad, en la autopista Cimarrón Andresote, cuando viajaban en una unidad de transporte público desde Barquisimeto hacia Sabana de Parra, capital del municipio José Antonio Páez en Yaracuy.
El colectivo Iveco Daily, signado con las placas AG0328, tenía capacidad para 20 personas y estaba adscrito a la línea Nuestra Señora del Rosario de Sabana de Parra.
Las causas que originaron que la buseta se saliera de la vía y se estrellara en la quebrada debajo del puente, todavía son inciertas, la versión de la falla mecánica que hizo precipitar la unidad cobra mayor fuerza.
Nueve pasajeros murieron instantáneamente, y los restantes presentaron lesiones de magnitud considerable. Rescatistas de Protección Civil y Bomberos de Yaracuy colaboraron en trasladar a los usuarios de la unidad hacia el centro asistencial. En el camino murieron otras dos personas y en el hospital otro joven.
Son ocho mujeres fallecidas, tres hombres y una lactante de tres meses de nacida, todos de Sabana de Parra, a excepción de una pasajera residente de La Florida en Yaritagua.
Otras once personas resultaron lesionadas, entre ellos el conductor del colectivo, identificado como José del Carmen García, de 41 años de edad, quien presentó traumatismo craneoenefálico.
Los otros heridos fueron identificados como Maikel José Granda (18), Humberto Oviedo (68), Jessica Arias (32), María Álvarez (53), Leidy Moncada (40), Fabiola Moncada (57), Miguel Moncada, Inés Mendoza, un adolescente de 11 años de edad y un niño de 3 años.
El hospital de Yaritagua colapsó, por lo cual los lesionados fueron remitidos hacia el principal centro de salud pública en San Felipe, a excepción de la niña quien fue llevada hacia el Hospital Pediátrico Agustín Zubillaga en Barquisimeto.
Llanto y desconcierto en el hospital
Las escenas más dolorosas fueron las protagonizadas por los familiares de las víctimas en el hospital de Yaritagua. Desde todas partes de Yaracuy y Lara llegaban personas quienes tenían la sospecha de que su familiar viajaba en la unidad accidentada.
Llenaban sus pulmones de aire y entraban a la sala para el reconocimiento de los cuerpos. A la salida se escuchaban gritos e intensos sollozos. Otros con mejor suerte se tranquilizaban al ver que su ser querido no estaba entre los occisos.
En el sitio surgieron innumerables rumores de las causas de la tragedia, algunos dijeron que la unidad se estrelló en la quebrada en el instante en que ocurría un asalto, esta hipótesis está siendo investigada por las autoridades.
Todos los cuerpos fueron trasladados hacia la morgue de San Felipe y los gastos fúnebres están siendo costeados por la Gobernación de Yaracuy.
