El abasto Bicentenario fue el único que abrió sus puertas el día de ayer, provocando colas en el lugar. Por su parte la Productora y Distribuidora Venezolana de Alimentos (Pdval) se mantuvo cerrada, aún cuando suele trabajas los días sábados, contrario a Mercal.
Toallas sanitarias y champú fueron vendidos en el comercio desde tempranas horas de la mañana, muchos de los usuarios aprovecharon el día libre para acercarse al lugar a realizar la cola aún desconociendo lo que se estaba ofreciendo.
En cuanto a la venta de carne, pollo o pernil, personas que laboran cerca del comercio aseguraron que desde hace semanas no llegan tales productos, por lo que los compradores no tienen como opción acudir a uno de los abastos del Estado para hacer la compra de los productos para la cena de fin de año.
Alternativa
Por su parte el Mercado Terepaima permaneció laborando con normalidad, con gran afluencia de personas. Los comerciantes señalaron que las ventas se han mantenido y que si bien la gente ya no compra las mismas cantidades que solían adquirir, no pierden la oportunidad de hacer hallacas, así sean pocas.
Las hojas de las hallacas, aceitunas y alcaparras encabezan la lista de compra de quienes asisten al mercado.
Las carnicerías del Terepaima aseguraron contar con lo que el cliente solicita, sin embargo los precios han aumentado considerablemente. El pernil ha perdido su atractivo y se han optado por llevar algún otro producto que lo reemplace. Algunos usuarios no pierden la tradición de reunirse con la familia en días cercanos a las festividades y hacer algún tipo de sopa, por lo que la gallina ha sido uno de los alimentos que más se han llevado.
Con fe de que las ventas no caigan se mantienen los vendedores, quienes aún ofrecen costos menores que en otros lugares de la ciudad, representando así una alternativa para los compradores.