La navidad es conocida por la cantidad de platos que hay para degustar, además de ser una época para compartir, por lo que generalmente se tienen alteraciones a la hora de comer, pues los almuerzos y cenas familiares o con amigos suelen ser comunes.
Los alimentos no son los acostumbrados, las horas no son las indicadas y las cantidades tampoco, y son estos factores los que más perjudican a las personas durante diciembre.
Muchos se dejan guiar por el hecho de no sufrir enfermedades gastrointestinales, sin embargo esto no garantiza que no presentarán problemas digestivos a la hora de consumir alimentos en exceso, es por eso que Marco Mendoza, médico gastroenterólogo presentó algunas recomendaciones para estos días festivos.
“No comer más de lo necesario es lo principal”, para el especialista es esencial mantener las porciones necesarias y no dejarse llevar por la gula. Si bien los alimentos navideños suelen disfrutarse exclusivamente en esta época, no debe caerse en los excesos, por el contrario, se deben consumir las porciones comunes de un día a día.
Las grasas y condimentos abundan en diciembre, lo que representa una diferencia en la dieta básica, y por lo tanto otra alteración que provoca que el organismo reaccione de manera diferente y se pueda presentar malestar.
Mendoza resaltó el exceso de consumo de carnes rojas, por lo que recomienda ingerirlas de manera moderada, asimismo con los condimentos, pues pueden provocar acidez.
Si bien parece no dársele mucha importancia, los horarios resultan otro posible problema, pues el organismo posee su propio reloj y esto significa que si hay una diferencia relevante entre los horarios que se suele comer, puede generar un descontrol el cual traerá consecuencias, por lo que se aconseja mantenerse entre los horarios habituales, aún cuando se rompa con lo que puede ser un protocolo familiar.
De igual forma el exceso en cuanto a consumir más raciones de lo normal, es decir, si se está acostumbrado a comer 5 veces al día y se agregan dos comidas más, representará otra alteración.
Todas estas modificaciones alimenticias que se pueden presentar durante diciembre pueden traer consecuencias, independientemente de si se tiene algún antecedente o se sufre como tal de alguna patología digestiva.
El especialista explica que se pueden presentar cólicos biliares formados por la grasa consumida; asimismo una de las enfermedades más comunes es la pancreatitis que se puede producir por la gran ingesta de alcohol.
Ante esto Mendoza señala la importancia de moderar el consumo de licores, pues la unión de esto con comidas dañinas puede ser fatal, especialmente en aquellas personas con problemas gastrointestinales.
Diciembre es el mes en el cual se abusa de las porciones, y si bien es un mes que recibe muchas emergencias por consecuencias de esto, en enero se revelan todos los excesos que se tuvo durante las celebraciones decembrinas.
Es importante tomar conciencia de aquellos alimentos que pueden ser perjudiciales para la salud y evitarlos o al menos no consumirlos en gran cantidad, para de esa forma evitar problemas que puedan ser permanentes.
