La situación de Venezuela es muy mala, como consecuencia de la caída de los precios del petróleo.
Al hacer la afirmación el economista José Toro Hardy, ex miembro del directorio de Pdvsa, explica: Durante muchos años, el petróleo alcanzó niveles insospechadamente altos.
En lugar de utilizar esos recursos para promover una economía sustentable, el Gobierno los dilapidó, tratando de crear un súper partido político, pensando que los precios del petróleo iban a subir indefinidamente.
Al Gobierno y a sus dirigentes les interesaba un partido a través del cual controlaran al país con base en el alza del crudo exportado. No solo en Venezuela, sino afuera y para eso crean Petrocaribe, Petroamérica y otras cosas.
Desmontaron el Fondo de Estabilización Macroeconómica que existía y además, expropiaron más de cuatro millones de hectáreas, que antes eran productivas y ahora no lo son.
Nacionalizaron y expropiaron una enorme cantidad de empresas e industrias, muchas de las cuales hoy en día, ya no son productivas tampoco,pues están trabajando en un porcentaje pequeño de su capacidad si es que no han cerrado sus puertas. Frente a esa situación la caída de los precios del petróleo es devastadora para la economía venezolana, porque el 97 por ciento de todos los dólares que le ingresan al país provienen de una actividad que hoy en día está lamentablemente deteriorada, no solamente por la caída de los precios del petróleo, sino también porque ha caído la producción misma del petróleo venezolano y porque la propia Pdvsa está semi destruida.
No han hecho las inversiones de mantenimiento en las instalaciones de la empresa, tampoco en el mantenimiento de yacimientos, las refinerías están en un estado lamentable y fue despedido el cerebro de la compañía.
Cuando el hoy desaparecido Hugo Chávez despidió a 20 mil trabajadores, que tenían un promedio de quince años trabajando para la industria petrolera, lo que hicieron fue tomar 300 mil años de experiencia y conocimientos, para lanzarlos al cesto de la basura.
De esos 20 mil trabajadores despedidos, el 75 por ciento formaban parte de la nómina ejecutiva, donde se acumulaba el conocimiento y la experiencia. Por eso digo que destruyeron el cerebro de Pdvsa.
Hoy en día el país no tiene cómo reaccionar. En el ámbito petrolero, falta gente calificada y preparada. Adicionalmente, han sido destruidos los mercados naturales que tenía Venezuela para la colocación de su petróleo.
De manera que ante esta circunstancia, el país está enfrentado a la urgente necesidad de un cambio de modelo, porque dentro del modelo que ha provocado esta ruina, no le queda al país sino una grave profundización de la crisis.
Solamente un cambio de modelo permitiría oxigenar la economía venezolana.
-¿Cuántos años se requieren para lograr esa oxigenación?
-Creo, en primer término, que vamos a tener que reconstruir una economía menos dependiente del petróleo. Es absurdo que un solo sector aporte el 97 por ciento de las divisas que requiere un país. En segundo lugar, el tiempo de recuperación económica de Venezuela va a depender de dos cosas: de un acuerdo social para poder tomar las medidas que requiera la recuperación de Venezuela. La señal del 6 de diciembre, cuando los venezolanos votaron para darle a la oposición, una súper mayoría en la Asamblea Nacional, significa que la sociedad venezolana está dispuesta a respaldar un cambio.
En segundo lugar, hace falta que ese cambio reúna las características necesarias para recuperar a Venezuela.
Para recuperar a Venezuela necesitamos altísimas inversiones no sólo en el sector petrolero, sino en todas las demás áreas de la economía. Y eso se logrará si hay confianza y seguridad jurídica.
Si además de estas condiciones, existen políticas públicas, la recuperación puede ser relativamente rápida. De lo contrario, no habrá recuperación.
-Si en este instante el precio del barril del petróleo es de casi 28 dólares, ¿cuánto cuesta producirlo porque dentro de ese valor está la extracción y todo el proceso, incluyendo el flete que no es nada barato?
-No lo sé. Hoy día Pdvsa está tan cerrada como el Banco Central de Venezuela. Así como no sabemos cuál es la inflación porque desde hace un año el BCV no da cifras, ni sabemos cuál es el Producto Interno Bruto.
Lo que sí tiene que entender el Gobierno es que hoy en día la situación en Venezuela es incomparable con el Caribe.
Ninguna de ellas, ni República Dominicana, ni Nicaragua, e incluso Cuba, tienen una situación más dura que la nuestra.
Tenemos la inflación más alta, la mayor caída del Producto Interno Brut y la mayor caída de las inversiones.
No hay una economía que tenga peor situación a la de Venezuela. Y por lo tanto es absurdo pensar que con este modelo que nos ha impuesto el Gobierno podemos seguir adelante, porque cada día los problemas económicos se agravarán.