Este miércoles en segunda discusión, se aprobó el Proyecto de Ordenanza del Presupuesto Municipal. La sesión se efectuó en la presidencia del Concejo Municipal de Iribarren, a la cual acudieron la bancada oficialista y la concejala Milagro Gómez de Blavia por la bancada opositora. Gómez de Blavia salvó su voto.
Asimismo, explicó que no cumplidos los lapsos y trámites que establece la Ley Orgánica del Poder Público Municipal hay que reconducir el presupuesto porque la administración pública no puede quedar desasistida.
Añadió que la figura de la reconducción significa adaptar el presupuesto del año anterior al 2016.
“Eso tiene consecuencias, sobre todo en este momento político y económico que vivimos. Estamos reconduciendo el presupuesto que presentó la administración anterior en el año 2013 para el 2014, el mismo que continuó en 2015 y que seguirá ahora en 2016”.
Eso no se lo merecen los barquisimetanos, dijo. “Esta es una ciudad cambiante que exige nuevas atenciones, aumentan los problemas, se abren oportunidades, cada alcalde quiere establecer sus líneas de trabajo”, precisó.
Indicó que las cosas ocurren por dolo (intención) o culpa (negligencia, imprudencia o impericia).
“Le corresponderá a la historia y a la gente que aspira que sus demandas sean atendidas, evaluar a qué se debió esta circunstancia. Si fue perturbar o fue incapacidad, eso se verá, lo cierto es que a la directiva del municipio se le vino el tiempo encima y ahora pretenden hacer un manejo acomodaticio de la ley”. La edil manifestó que los oficialistas utilizaron la figura de la sesión permanente fuera de los lapsos para hacer creer que el presupuesto se discute desde el 14, 15 y 16. “Es una sesión permanente que no aplica porque la ley establece que una sesión permanente tiene recesos que no pueden exceder los 15 minutos cuando el debate lo amerita. La ley no es un elemento acomodaticio”, enfatizó.
En ese sentido, dijo que el Concejo no debatió oportunamente el presupuesto, consignado por el alcalde el 30 de octubre.