La Gobernación de Lara, conjuntamente con la Alcaldía de Iribarren, está buscando solución al drama de las familias habitantes de las comunidades inmediatas a la avenida Uruguay que han perdido o están en peligro de perder sus viviendas a causa de los hundimentos que allí se están registrando.
“Pero se trata de un situación en la que también debe intervenir el Ejecutivo Nacional a través de organismos como el Ministerio de Hábitat y Vivienda, Ministerio de Transporte y otros, porque la Gobernación y la Alcaldía no pueden solucionarla solos”, afirmó el gobernador Henri Falcón en rueda de prensa.
Estuvo acompañado de directivos de su poder ejecutivo y técnicos del Colegio de Ingenieros.
Informó haber enviado comunicaciones a los titulares de varios organismos nacionales para que, posiblemente la próxima semana, celebren una reunión y buscar alternativas al caso.
Confirmó que son 130 viviendas que se encuentran en riesgo crítico, afectadas directamente por el desplazamiento del lugar donde se encuentran asentadas.
Dijo que es necesario reubicar a todas las familias afectadas en soluciones habitacionales definitivvas, además de crear conciencia sobre las zonas donde se puede construir para que no se presenten situaciones como la de la Uruguay.
Enfatizó en que la Gobernación no tiene 130 soluciones habitacionales disponibles en estos momentos, pero el Ejecutivo Nacional sí y debe darle prioridad a las familias de La Ribera afectadas.
Le llama la atención que, a pesar de la gravedad del problema, hasta ahora no ha habido ningún pronunciamiento al respecto por parte del Ejecutivo Nacional.
Reconoció la colaboración que en el caso ha venido prestando el Colegio de Ingenieros, así como el trabajo de los técnicos de la Gobernación, quienes han confirmado la existencia de fallas en la zona.
El ingeniero Luis Andrades, se refirió técnicamente a la problemática de la zona, no sólo de las inmediaciones de la Uruguay sino de todo el talud sur de Barquisimeto.
Concretamente en el sector del problema, se ha detectado una sobrecarga en el terreno que le ha hecho inestable, inseguro, no apto para construcciones habitacionales, además de que en las cercanías pasan las fallas del río Turbio y de Boconó.
Igualmente, en el sector hay muchas mangueras dañadas de las que constantemente sale agua que provoca erosión en el terreno.
Para el ingeniero Andrades, siempre habrá riesgo en la zona del talud sur.
El CLEL recomienda, entre otras medidas, mejorar las condiciones del terraplén de la Uruguay y rehabilitar los 80 a 100 metros entre la Cinemateca y el callejón 19, que es el más afectado por los hundimientos.